Salvación Nacional está en la tarea de cautivar a la derecha desencantada

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En medio de una correría nacional que inició el directivo del renacido Movimiento de Salvación Nacional, Enrique Gómez Martínez, sobrino del inmolado estadista Álvaro Gómez Hurtado, visitó las instalaciones de Diario EL FRENTE donde hizo gala de su característica y caustica perspectiva del actual gobierno nacional, el cual no baja de vergonzoso, inepto, corrupto.

Por Camilo Ernesto Silvera Rueda
“Hemos venido a visitar un grupo de amigos con quienes estamos construyendo las mesas directivas para las candidaturas que va a promover el Movimiento de Salvación Nacional, nuestra aspiración es promover candidaturas a las principales ciudades del departamento, candidatos que sean renovadores, diferentes, propositivos”, dijo de manera protocolaria el director de Salvación Nacional.


Nosotros ocupamos un espacio inicialmente jurídico y eso en mi caso particular nos hizo ganar mucha imagen ante la opinión, hubo mucho reconocimiento de nuestra postura de oposición, y lo que buscamos ahora es aumentar la militancia, el voluntariado para construir una estructura política que realmente sea alternativa entre la politiquería tradicional que fueron fuertemente derrotados el 2022, porque representaron una clase política que tiene aburrida la gente, con clientela, comprando el voto, con malas prácticas; y por el otro lado, el país se enfrenta a un reto grande que es el Pacto Histórico, que con un modelo de gobierno claramente socialista y radical, que si es malo en lo nacional, es y será funesto en lo regional.
Una verdadera vergüenza para los conservadores de base, para los que creen en la ideología conservadora, y no me sorprende que esa camarilla parlamentaria se haya vendido por un calado, así lo han hecho en todos los gobiernos sin ninguna coherencia ideológica y lo que nos han demostrado es que lo único coherente en ellos es la lonchera de los parlamentarios, y eso es lo que vemos en esa coalición de gobierno que se ha propuesto traer malas reformas para el país y eso le pasara la cuenta al Partido Conservador en octubre en el 2023 y lo van a pagar en el 2026.


Petro destruyó la industria petrolera y de gas porque no se necesita que Irene Vélez hable en Suiza para acabar con la industria, esos impuestos que puso en la tributaria para este sector tan importante en la economía nacional, la va a dejar muy golpeada, aspecto que también vemos que perjudicó al sector privado, al que también se le impusieron una serie de gruesos tributos, poniendo en desventaja la generación de empleo y oportunidades para los colombianos, y frenar la inversión y esto obviamente nos perjudica mucho porque tendremos un 2023 marcado por la alta inflación frente a la cual Petro no ha hecho absolutamente nada en los primeros seis meses de gobierno.


Si tenemos que hacer mejoras al sistema pero lo que está proponiendo esta reforma es destruir la estructura articulada del sistema y entregarle el grueso de esa financiación a los políticos a nivel territorial. Es prácticamente volver al antes de la ley 100, lo cual traumatizará a el acceso a la salud de los colombianos.
Esta reforma además solo beneficia al menos del 25% de la población económicamente activa porque si usted mira la encuesta laboral del DANE se dará cuenta de que 14 millones y medio de personas están buscando, de tal manera que la reforma laboral no está pensada para esa gran población para generarles oportunidades sino que está pensado en perjudicar al sector que precisamente es el que genera las oportunidades de empleo en el país.

Esa reforma tributaria lo que procura es encarecer los costos laborales y eso terminará generando consecuencias como el aumento del desempleo, el aumento de la informalidad y del rebusque con detrimento en la seguridad social y con detrimento en la productividad del país.