Acribillado joven de 25 años
Resumen
Félix Cárdenas Molina, de 25 años, perdió la vida en Los Alpes de Cúcuta debido a disputas entre bandas por el control del microtráfico. El hecho resalta la falta de seguridad en la zona, incrementando el temor entre sus habitantes.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
La violencia visitó Los Alpes de Cúcuta, donde en la tarde del miércoles fue asesinado Félix Cárdenas Molina, un joven de aproximadamente 25 años, en un hecho que las autoridades atribuyen a disputas entre bandas por el control territorial del microtráfico.
El crimen ocurrió el pasado miércoles 2 de julio hacia las 5:00 p. m. en una zona boscosa del sector, junto a unas escaleras que conectan las partes baja y alta del barrio. Según testigos, Cárdenas solía frecuentar ese lugar presuntamente para consumir estupefacientes. Fue allí donde dos hombres armados lo interceptaron y le dispararon en repetidas ocasiones. Fueron ocho impactos los que recibió el joven, dos de ellos en la cabeza.
Por la peligrosidad de la zona y la dificultad de acceso, fue necesario desplegar un esquema de seguridad para que unidades de la Policía Metropolitana de Cúcuta y la Brigada Interinstitucional de Homicidios (Brinho) pudieran ingresar. Las escaleras fueron acordonadas mientras el CTI realizaba la inspección técnica del cadáver.
Cárdenas había crecido en el sector y prestó servicio militar en el Ejército Nacional. Sin embargo, luchó toda su vida contra el consumo de sustancias psicoactivas. De acuerdo con familiares, horas antes del crimen, una vecina le había aconsejado dejar ese estilo de vida, a lo que él respondió: “Yo me voy a salir de esto, madrecita”.
Hipótesis del crimen
La hipótesis principal del homicidio apunta a una disputa entre estructuras delincuenciales que operan en la parte alta y baja de Los Alpes. Según información preliminar, el territorio estaría siendo disputado por dos grupos que buscan el control de las rutas locales del microtráfico.
La comunidad denunció que la zona carece de cámaras de seguridad y presencia permanente de la fuerza pública, lo que la convierte en un punto crítico para este tipo de hechos violentos.
Las autoridades adelantan las investigaciones para dar con los responsables del crimen, mientras crece la preocupación entre los habitantes del barrio por la inseguridad que los rodea.