Resumen
Tres suicidios, incluido el de un niño de 13 años, en menos de 24 horas en La Guajira, Colombia, resaltan la crisis de salud mental en la región. Expertos instan a fortalecer los servicios de salud mental y establecer estrategias de prevención.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
La Guajira vive una crisis silenciosa. Tres personas, entre ellas un menor de 13 años, decidieron acabar con sus vidas en menos de 24 horas, en hechos ocurridos en Riohacha, Barrancas y Maicao. Esta alarmante situación ha encendido las alertas sobre la salud mental en el departamento.
El primer caso se registró el martes en una finca de Barrancas, donde fue hallado sin vida el joven wayuu Armando Vangrieken Epinayú. Horas más tarde, en Carraipía (Maicao), Tony Joiro Cantillo se quitó la vida en su vivienda. La tragedia culminó con el suicidio de un niño de 13 años en Riohacha, tras una discusión con su madre.
Estos trágicos hechos evidencian la urgencia de fortalecer los servicios de salud mental en la región. Expertos advierten que el suicidio es un problema complejo con múltiples factores causales, entre ellos, problemas familiares, dificultades económicas, bullying y trastornos mentales.
La Organización Panamericana de la Salud señala que el suicidio es un problema de salud pública que requiere una respuesta integral. Se necesitan estrategias de prevención, detección temprana y atención a las personas en riesgo.
Coincidiendo con esta preocupante realidad, la Defensoría del Pueblo alertó sobre el aumento de intentos de suicidio en menores de edad a nivel nacional. Según el INS, entre 2019 y 2023 se registraron más de 51 mil intentos en este grupo poblacional.
