Resumen
La combinación de una prolongada sequía y altas temperaturas ha generado un alarmante incremento en los incendios forestales en Santander. Este fenómeno amenaza gravemente la biodiversidad y la seguridad de las comunidades, mientras las autoridades intensifican sus llamados a la prevención.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
Durante los últimos días, Santander enfrenta una situación crítica por el aumento de incendios forestales.
Por: Rafael ‘Chiqui’ Serrano Camelo
Durante los últimos días el departamento de Santander enfrentó una situación crítica debido al alarmante aumento de incendios forestales. En total, se reportaron 11 incendios en diferentes municipios, ocho de los cuales ocurrieron en Bucaramanga, lo que despertó gran preocupación entre las autoridades y organismos de socorro. La combinación de una prolongada temporada seca y altas temperaturas ha creado un entorno propicio para estas emergencias ambientales.
El impacto de los incendios en Bucaramanga
El cuerpo de Bomberos de Bucaramanga confirmó la atención de ocho incendios forestales en un solo día, el domingo 19 de enero. Este incremento sin precedentes representa una grave amenaza tanto para la naturaleza como para las comunidades locales. Entre los incendios más significativos se destaca el ocurrido en el lote de eventos metropolitano, ubicado en la Ciudadela Real de Minas. Este lugar, cercano al Mercado Campesino y a un parque de diversiones recién instalado, generó una situación de pánico entre los ciudadanos debido a la intensa humareda.
Otro incendio de gran magnitud fue reportado en el barrio La Malaña, frente a los tanques del Acueducto Metropolitano de Bucaramanga, en inmediaciones del barrio Morrorico. Además, se registró una emergencia en Provenza parte baja, específicamente en la vía que conecta Provenza con el Anillo Vial. Afortunadamente, los bomberos lograron controlar estos incendios antes de que se extendieran.
Otros sectores afectados en Bucaramanga incluyeron Regaderos, Hamacas, San Ignacio, Café Madrid y el Mega colegio del Norte, en el sector de Chimitá. Aunque estos incendios fueron de menor extensión, igualmente representan una amenaza constante para la biodiversidad y la seguridad de las comunidades.
Emergencias en otros municipios
El municipio de El Guacamayo enfrentó el incendio forestal más grande registrado durante el fin de semana, con una conflagración que consumió aproximadamente 80 hectáreas de vegetación nativa. Gracias al esfuerzo conjunto de los organismos de socorro, este incendio fue finalmente controlado. Sin embargo, las secuelas para el ecosistema son devastadoras.
Por su parte, los municipios de Charta y Aratoca también reportaron incendios, aunque de menor extensión. Estas emergencias evidencian la vulnerabilidad del territorio santandereano frente a los incendios forestales durante la temporada seca.
Nuevo incendio en San José de Miranda, Barbosa, Aratoca y sector del Chicamocha
Hoy, 22 de enero de 2025, se suma un nuevo incendio forestal a esta alarmante situación. En horas de la mañana, las autoridades reportaron una conflagración en el sector El Espinel, en el municipio de San José de Miranda. Este incendio ha sido exacerbado por la intensa sequía y las altas temperaturas que afectan a la región.
El terreno accidentado del sector El Espinel dificulta las labores de extinción, y la vegetación seca actúa como combustible para las llamas. Ante esta situación, los organismos de socorro trabajan contrarreloj para controlar el fuego y evitar que se extienda a otras áreas. Las autoridades han reiterado el llamado a la ciudadanía para que evite realizar quemas controladas y denuncien cualquier actividad sospechosa que pueda generar incendios.
En un hecho adicional que refleja la gravedad de la situación, las autoridades rescataron a dos adultos atrapados en el incendio de una vivienda en la vereda La Palma de Barbosa, en el municipio de Barbosa.
Una mujer de 45 años y un hombre de 62 años quedaron atrapados en medio de las llamas, que consumieron por completo el inmueble donde se ubicaban. La operación de rescate fue llevada a cabo por soldados de la Cuarta Brigada del Ejército, quienes además apoyaron al cuerpo de bomberos en el control del fuego. Afortunadamente, las personas no sufrieron lesiones, y ahora se investiga el origen del incendio.
Otro hecho lamentable se vivió en sector del cañon del Chicamocha y de Aratoca donde organismos de control se dispusieron en la labor de controlar este lamentable suceso. Estos hechos fueron controlados así lo confirmó Eduard Sánchez, jefe de Oficina para la Gestión del Riesgo de Desastres en Santander (OGRD). El jefe de la Oficina para la Gestión del Riesgo de Desastres en Santander (OGRD), Eduard Jesús Sánchez Ariza, entregó un balance sobre los incendios forestales que se presentaron en la tarde de este miércoles 22 de enero, en Aratoca vereda San Pedro, sector Piedras y en un sector cercano al Chicamocha.
Eduard Sánchez confirmó que los dos incendios forestales tuvieron la atención inmediata de Gestión de Riesgos y Desastres y del cuerpo de bomberos. En Aratoca, se contó con 7 unidades del Cuerpo de Bomberos y 40 voluntarios de la comunidad para lograr controlar las llamas. Por su parte, en Chicamocha las unidades de emergencia y cuerpo bomberil también unieron fuerzas para detener a tiempo el fuego y evitar mayor peligro.
“Estos incendios en este momento están controlados, ya en la fase de liquidación. Estamos esperando los reportes que nos den los cuerpos de bomberos y los consejos municipales de riesgo, pero ya se articuló con ellos y estamos esperando a que nos den las partes de liquidación”, confirmó el jefe de Oficina para la Gestión del Riesgo de Desastres en Santander, Eduard Sánchez.
En lo que va de la temporada seca, Santander ha registrado más de 20 incendios forestales, 11 de los cuales han ocurrido en el Área Metropolitana de Bucaramanga. Los expertos advierten que esta situación podría agravarse si no se presentan lluvias en las próximas semanas. La falta de precipitaciones ha dejado al departamento en una situación crítica, con una vegetación extremadamente seca y vulnerable a las llamas.
Llamado de las autoridades
El director del cuerpo de Bomberos de Bucaramanga, Diego Orlando Rodríguez, hizo un llamado urgente a la ciudadanía para que tome medidas de prevención. Rodríguez destacó que la mayoría de los incendios forestales son provocados, intencionalmente o no, por actividades humanas: “Actuemos en prevención porque es una alarma que se generen ocho incendios durante un solo día. La realidad es que la mayoría de estos incendios son causados por las propias quemas que realizan los ciudadanos”.
Entre las recomendaciones principales, se incluye evitar realizar quemas en terrenos forestales, no arrojar basura ni vidrios en zonas boscosas, y denunciar cualquier actividad sospechosa. Además, se insta a la población a no intentar apagar incendios por cuenta propia y, en cambio, reportar inmediatamente cualquier emergencia a la línea 119 de los bomberos.
El impacto ambiental
Los incendios forestales no solo representan un riesgo para las comunidades humanas, sino que también causan daños irreparables al medio ambiente. La destrucción de hectáreas de vegetación afecta gravemente a la fauna y flora locales, y contribuye al cambio climático al liberar grandes cantidades de dióxido de carbono a la atmósfera.
En el caso del incendio en El Guacamayo, por ejemplo, la pérdida de 80 hectáreas de vegetación nativa implica la desaparición de hábitats críticos para especies locales. Asimismo, la calidad del aire se ve comprometida debido a la emisión de humo y contaminantes, lo que puede tener repercusiones en la salud de las personas.
La situación actual en Santander destaca la necesidad de fortalecer las acciones de prevención y concienciación en la comunidad. Las autoridades ambientales y de gestión del riesgo han activado protocolos de emergencia y continúan trabajando para mitigar el impacto de estos incendios. Sin embargo, la colaboración ciudadana es esencial para evitar que esta crisis se agrave.
Entre las estrategias planteadas se incluye la educación de la comunidad sobre los riesgos asociados a las quemas y la implementación de sistemas de alerta temprana en zonas vulnerables. Además, se busca fortalecer la capacidad de respuesta de los organismos de socorro mediante el equipamiento adecuado y la capacitación del personal.
La alarmante cifra en aumento de incendios forestales en Santander pone en evidencia la urgencia de tomar medidas inmediatas para proteger el medio ambiente y garantizar la seguridad de las comunidades.
La alertas sigue: La temporada seca y las altas temperaturas continúan siendo un desafío, pero con prevención, educación y colaboración de las comunidades, es posible mitigar los riesgos y evitar tragedias mayores en nuestra región.
