Alarmante retroceso glaciar en Colombia
Resumen
Colombia ha perdido el 90% de sus glaciares desde el siglo XIX, con una reducción del 3,2% solo entre 2021 y 2022. La ONU declaró 2025 como el Año Internacional de la Conservación de los Glaciares para resaltar su importancia hídrica y climática.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
Seis nevados al borde de la desaparición
La crisis climática sigue dejando huella en Colombia: el país ha perdido cerca del 90% de sus glaciares desde finales del siglo XIX y hoy apenas quedan 33 km² repartidos en seis nevados en riesgo de desaparecer. Tan solo entre 2021 y 2022, la cobertura glaciar se redujo en un 3,2%, equivalente a 1,11 km² o unas 156 canchas de fútbol.
La situación es tan grave que la ONU declaró 2025 como el Año Internacional de la Conservación de los Glaciares y estableció el 21 de marzo como el Día Mundial de los Glaciares. El objetivo: alertar al mundo sobre la importancia de estos ecosistemas para la seguridad hídrica y el equilibrio climático.
En Colombia, la pérdida más reciente ocurrió en 2024 con la desaparición del glaciar Conejeras, en el Nevado Santa Isabel, tras el aumento del derretimiento impulsado por el Fenómeno de El Niño. Según el Ideam, la cobertura glaciar nacional disminuye entre un 3 y 5% cada año.
“Los glaciares son reservas vitales de agua dulce y su desaparición amenaza la biodiversidad y la seguridad hídrica. El cuidado de estos ecosistemas es una responsabilidad histórica con las futuras generaciones”, aseguró Lena Estrada Añokazi, ministra de Ambiente.
Actualmente, los glaciares colombianos se encuentran dentro de áreas protegidas como los parques naturales Los Nevados, El Cocuy, Nevado del Huila y la Sierra Nevada de Santa Marta. En estas zonas se adelantan programas de monitoreo, conservación y educación ambiental.
El Nevado Santa Isabel, con solo 0,3 km², es el más vulnerable y podría desaparecer en cinco años. En contraste, el glaciar más grande es el de El Cocuy, con 12,8 km², aunque también está en retroceso. Desde hace dos décadas, el Ideam monitorea estos ecosistemas, clave para el abastecimiento de agua y el patrimonio cultural de diversas comunidades.
La declaración de 2025 como año internacional de la conservación de los glaciares busca reforzar la acción climática y llamar la atención sobre una pérdida que ya es visible y que, de no frenarse, será irreversible.