Resumen
Las amistades tóxicas afectan gravemente la salud mental, causando depresión, ansiedad y aislamiento. Se caracterizan por manipulación y falta de apoyo, siendo comunes en la adolescencia pero también presentes en la adultez. Identificarlas y establecer límites es crucial para el bienestar emocional.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
Las amistades tóxicas pueden tener un impacto devastador en la salud mental, generando consecuencias graves como depresión crónica, ansiedad y aislamiento social. Estas relaciones, que a menudo pasan desapercibidas, se caracterizan por la manipulación, control, envidia y falta de apoyo, lo que puede llevar a quienes las experimentan a sentirse estresados y sin energía.
Sandra Rocío Guerrero Torres, psicóloga y representante del Campo Psicología Jurídica del Colegio Colombiano de Psicólogos en el Valle del Cauca, define una amistad tóxica como aquella en la que uno o ambos amigos se sienten mal la mayor parte del tiempo. En lugar de brindar tranquilidad y compañía, estas amistades suelen generar malestar emocional.
La experta señala que las amistades tóxicas son más comunes en la adolescencia y la juventud temprana, un período crítico para la formación de la identidad y las habilidades sociales. Sin embargo, también pueden presentarse en la adultez, especialmente en entornos laborales o grupos sociales. Aunque son más frecuentes entre las mujeres, ambos géneros pueden verse afectados, aunque de maneras diferentes.
Identificar una amistad tóxica no siempre es fácil. Guerrero destaca varias señales a tener en cuenta, como la falta de reciprocidad, la crítica constante y la manipulación emocional. Si después de interactuar con un amigo te sientes agotado o menospreciado, es probable que estés en una amistad tóxica. Además, algunas personas pueden manifestar comportamientos tóxicos sin ser conscientes de ello, por lo que la autoconciencia es crucial.
Las consecuencias de estar en una amistad tóxica pueden ser significativas. A corto plazo, pueden provocar altos niveles de estrés y ansiedad, mientras que a largo plazo pueden afectar la autoestima y contribuir al desarrollo de problemas de salud mental como la depresión y la ansiedad crónica. Guerrero advierte que también pueden dificultar la formación de nuevas relaciones saludables.
Para quienes identifiquen una amistad tóxica, es fundamental establecer límites claros. En algunos casos, distanciarse o terminar la relación de manera respetuosa puede ser necesario. “Rodearte de personas que te apoyen y trabajar en tu bienestar emocional es clave para mantener relaciones saludables”, concluye Guerrero.
El Colegio Colombiano de Psicólogos recomienda buscar ayuda profesional si se sospecha estar en una relación que genera malestar emocional, enfatizando la importancia de cuidar la salud mental y fomentar relaciones sanas y enriquecedoras.
