Anthony de Ávila y su condena en “la cárcel de la Camorra”
Resumen
Anthony 'el Pitufo' de Ávila, exfutbolista colombiano, está encarcelado en la prisión Poggioreale de Italia, conocido por sus duras condiciones, tras ser acusado de colaborar con un clan de narcotráfico. Cumplirá su condena en un entorno denunciado por derechos humanos.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
La historia de Anthony "el Pitufo" de Ávila, exdelantero de la Selección Colombia y leyenda del América de Cali, hoy transcurre entre los muros de Poggioreale, una de las prisiones más temidas de Italia. Desde su captura en septiembre de 2021 en Nápoles, acusado de colaborar con una red internacional de narcotráfico vinculada al clan Buonerba, el exfutbolista enfrenta una condena que lo mantendrá tras las rejas al menos hasta 2033.
Detenido mientras se encontraba de vacaciones, De Ávila fue capturado con base en una sentencia en ausencia dictada en 2004. Su caso generó revuelo no solo por el perfil público del condenado, sino también por las condiciones de su reclusión. Poggioreale, conocida como “la cárcel de la Camorra”, enfrenta serias denuncias de hacinamiento, torturas sistemáticas y violaciones de derechos humanos. Diseñada para albergar a 1.680 personas, hoy acoge a casi el doble, lo que agrava la precariedad del lugar.
Informes de organizaciones como Liberties y reportes judiciales indican que la prisión es escenario de abusos que van desde lesiones y coacción hasta presuntas torturas en la llamada “Sala Cero”, una celda de aislamiento sin videovigilancia. Estas condiciones han provocado un alarmante incremento en los suicidios entre los internos.
La defensa del exfutbolista, liderada por el abogado Fabrizio de Maio, ha enfatizado que, según la ley italiana, quienes son condenados por delitos de narcotráfico deben cumplir la totalidad de la pena sin beneficios de reducción o libertad condicional. Ante la ausencia de un tratado bilateral entre Colombia e Italia que permita su repatriación, De Ávila deberá seguir cumpliendo su condena en Poggioreale.
Mientras tanto, su familia enfrenta dificultades económicas para sostener los costos de la defensa legal. Allegados como Tulio Gómez, presidente del América de Cali, han lamentado su suerte, atribuyendo los hechos a malas compañías. La opinión pública se divide entre la nostalgia por su legado futbolístico y la contundencia de la justicia internacional.
