Así funcionaría la castración química para violadores, de ser aprobada en el Congreso

De acuerdo con su autor, el proyecto de ley obedece a esa búsqueda interminable del legislador de medidas útiles para regular los comportamientos sociales, en este caso, frente a uno que representa el rechazo de toda la comunidad como lo son los delitos sexuales contra menores de 14 años, que si bien son conductas ya sancionadas por la legislación, en la actualidad se observan cifras altas en los registros por lo que se pretende exigir al legislativo incluir sanciones más severas para atender de manera efectiva el fenómenos criminal. Detrás de la iniciativa está un santandereano.

Por Camilo Ernesto Silvera Rueda - Redacción Política / EL FRENTE

Se trata del representante a la Cámara Álvaro Rueda, quien radicó un proyecto de ley que plantea la inhibición hormonal para violadores de menores, una iniciativa que además contiene reformas al código de procedimiento penal. Para el representante santandereano es importante establecer acciones que castiguen severamente esta clase de delito, además considerando los casos que diariamente se dan en el país.

De acuerdo con el articulado conocido por EL FRENTE, la iniciativa tiene como propósito incluir dentro de nuestra legislación penal un complemento normativo a las sanciones que se encuentran establecidas para las conductas punibles del título cuarto del Código Penal colombiano “Delitos contra la libertad, integridad y formación sexuales”, especialmente capítulo primero y segundo, implementando figura de la castración química como sanción obligatoria y complementaria a las penas que ya contempla nuestro ordenamiento jurídico, herramienta punitiva que puede aportar a la rehabilitación social del reo como al cumplimiento de todas las funciones y propósitos de las penas.

"Esta medida busca establecer la inhibición hormonal del deseo sexual, como pena accesoria y medida terapéutica para condenados por delitos sexuales contra menores de 14 años", explicó el representante Álvaro Rueda, autor de la iniciativa, quien que aclaró sobre este procedimiento que será reversible, no quirúrgica, voluntaria al requerir consentimiento informado, y está basada en medicamentos aprobados por el INVIMA para reducir temporalmente los niveles de testosterona.

El parlamentario también dijo que "esta aplicación estará sujeta a orden judicial, supervisión médica periódica y tratamiento psicológico obligatorio; el proyecto también incluye reformas al Código Penal y al Código de Procedimiento Penal para regular la audiencia de imposición y el marco de aplicación, e instruye al Ministerio de Justicia y demás entidades a reglamentar su implementación".

“Hablamos de uno de los comportamientos más graves y que más reproche y repudio social genera, es el del acceso carnal y acto sexual debido a sus efectos irremediables, su nocividad y los trastornos que produce en la vida de la víctima sea en los aspectos fisiológicos, psicológicos, sociales, morales, emocionales y espirituales que estos causan.

Así funciona la castración química

La castración química consiste en la aplicación de inhibidores de deseo sexual mediante productos químicos con el objetivo de que tales medicamentos disminuyan los niveles de testosterona hormona del deseo sexual, en el cuerpo humano; figura que se basa en la idea de que el aumento de los niveles de testosterona aumentaría la agresividad, hipótesis que surge a raíz de un estudio realizado en 1972 por los científicos Kreuz y Rose con 21 jóvenes delincuentes encarcelados, llegando a la conclusión de que los que diferenciaba a los diez que habían cometido en su adolescencia delitos más graves y violentos era el hecho de poseer niveles superiores de testosterona en el plasma. No obstante, aunque los otros once tuvieran niveles inferiores, también habían delinquido.

Este término es utilizado para describir los medicamentos destinados a reducir la libido y a nulificar la actividad sexual, por lo general, para impedir que los violadores, pedófilos y otros delincuentes sexuales reincidan. Las tendencias psicológicas han demostrado que las tasas de reincidencia son muy altas entre los delincuentes sexuales una vez en libertad, por ello se ha buscado un método humano de tratarlos, distinto a una vida entera en prisión o la castración quirúrgica.