Resumen
A pesar de una leve reducción del 2.3% en homicidios en Colombia, con un promedio de 36 asesinatos diarios en 2024, la inseguridad sigue siendo alarmante. Además, hay incrementos en violencia intrafamiliar (+33.5%), agresiones sexuales (+25.6%), amenazas (+32%) y extorsiones (+11.4%).
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
El más reciente ‘Informe del Delito en Colombia’ de la organización Observadores Col revela que, a pesar de una leve disminución en los homicidios a nivel nacional, el panorama de inseguridad en el país sigue siendo alarmante. Con un total de 8.588 homicidios cometidos al 31 de agosto de 2024, Colombia presenta un promedio de 36 asesinatos diarios, según el informe basado en datos de la Policía Nacional.
Aunque la cifra de homicidios refleja una reducción del 2.3% comparado con el mismo periodo del año anterior, el impacto en algunas regiones sigue siendo significativo. Agosto se posicionó como el mes más violento, con 1.182 muertes, mientras que febrero registró el menor número de homicidios, con 996 casos. La proyección de la tasa de homicidios para este año es de 24.4 por cada 100.000 habitantes, con departamentos como Valle del Cauca, Antioquia, Atlántico, Cauca y Bolívar superando ampliamente esta media.
El informe también resalta el preocupante incremento en otros tipos de delitos. La violencia intrafamiliar tuvo un crecimiento del 33.5% en comparación con 2023, con 36.725 casos adicionales. Entre los municipios con el mayor aumento destacan Cúcuta (136%), Floridablanca (126%) y Villavicencio (114%).
Por otro lado, las agresiones sexuales subieron un 25.6%, lo que representa 5.980 nuevos casos. Las ciudades más afectadas son Bello (132%), Envigado (96%) y Medellín (80%).
Otros delitos en alza
El informe también menciona un crecimiento en amenazas (+32%), lesiones personales (+9.4%) y extorsiones (+11.4%). Municipios como Santa Marta, Medellín y Bogotá presentan los mayores aumentos en estos indicadores, mostrando la necesidad urgente de reforzar las estrategias de seguridad en el país.
Estos resultados reflejan un panorama de inseguridad que sigue afectando la calidad de vida en muchas regiones, lo que exige acciones inmediatas y coordinadas entre las autoridades y la ciudadanía.
