Resumen
En Santander, sobre 300 desplazados de la región del Catatumbo buscan refugio debido al conflicto armado. La Alcaldía de Bucaramanga acondiciona el estadio Edmundo Luna como albergue temporal, mientras se llevan a cabo procesos de caracterización para asegurar la ayuda adecuada.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)En Santander se vive una crisis humanitaria debido a la llegada de más de 300 personas desplazadas del Catatumbo, una región azotada por el conflicto armado. Estas familias, provenientes principalmente de Tibú, El Tarra y Teorama, han sido obligadas a abandonar sus hogares ante el recrudecimiento de la violencia en la zona.
Según cifras oficiales, hasta el momento se han contabilizado 220 familias desplazadas, distribuidas entre Bucaramanga, que alberga a 114 personas; Floridablanca, con 18; y El Playón, con 54.
Ante esta situación, la Alcaldía de Bucaramanga ha planteado la habilitación del estadio Edmundo Luna como albergue temporal. Aunque las instalaciones ya están acondicionadas con zonas de descanso, servicios básicos y provisión alimentaria, su apertura está en espera del proceso de caracterización oficial de las personas afectadas. Según Iván Darío Torres, Secretario de Desarrollo, este registro es clave para garantizar que la ayuda humanitaria llegue exclusivamente a quienes realmente han sufrido los efectos del conflicto y para evitar la llegada de personas que intenten aprovecharse de la emergencia haciéndose pasar por desplazados.
De manera simultánea, la Alcaldía y la Gobernación de Santander han habilitado centros de acopio en Bucaramanga para recibir donaciones que puedan mitigar las necesidades de las familias desplazadas. Entre los artículos prioritarios se encuentran alimentos no perecederos, ropa en buen estado, frazadas, artículos de higiene personal y medicamentos. Las autoridades han hecho un llamado a la solidaridad de los habitantes del área metropolitana para contribuir a esta causa humanitaria.
Se espera que, en los próximos días, una vez concluido el proceso de caracterización, se abra oficialmente el estadio para albergar a las familias desplazadas. Mientras tanto, el flujo constante de personas desde el Catatumbo continúa, intensificando la necesidad de coordinación y apoyo tanto por parte de las instituciones locales como de la ciudadanía.