Bus que cubría ruta Bucaramanga- Arauca se volcó en la vía
Resumen
Un bus de Copetran que cubría la ruta interdepartamental Bucaramanga-Arauca, volcó en el Alto de Santa Inés, causando varios heridos y posibles pérdidas mortales. Las condiciones climáticas y el estado de la vía son factores que se investigan.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)Mientras la niebla aún envolvía las peligrosas curvas de la vereda Santa Inés, en Toledo, un acto de cortesía vial se transformó en el prólogo de una tragedia. Hacia las 6:00 de la mañana de este miércoles 17 de diciembre, el bus de la empresa Copetran que cubría la ruta Bucaramanga–Arauca se precipitó al vacío en el kilómetro 60 de la vía La Soberanía, dejando un saldo desgarrador: el conductor del vehículo perdió la vida en cumplimiento de su labor.
Los detalles que emergen del siniestro pintan una escena de sacrificio y precariedad vial. Según la vocería oficial de la transportadora, el profesional al volante intentó orillarse en un tramo extremadamente angosto de la carretera para cederle el paso a otro vehículo que transitaba en sentido contrario. En esa maniobra de precisión, el terreno cedió o la estabilidad se quebró, provocando que la pesada máquina rodara por el precipicio ante la mirada impotente de los sobrevivientes.
Frente a las especulaciones que suelen rodear estos incidentes, la empresa fue categórica al blindar la memoria de su trabajador. Desmintieron de tajo las versiones que sugerían un microsueño o estado de embriaguez, subrayando que el protocolo de seguridad incluía a dos conductores para garantizar relevos óptimos y evitar la fatiga. No fue el cansancio, sino las trampas geográficas de una de las vías más olvidadas del país lo que selló el destino del bus interno 1516.
De los 16 ocupantes que emprendieron el viaje con la esperanza de llegar a territorio araucano, siete resultaron heridos con lesiones de diversa consideración y fueron evacuados hacia centros asistenciales cercanos. Mientras el CTI de la Fiscalía adelanta el penoso levantamiento del cuerpo en el fondo del abismo, el gremio transportador y la comunidad de Toledo lamentan la pérdida de un hombre que, en su último movimiento tras el volante, buscaba facilitar el camino de otro conductor.