Resumen
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
El alcalde de Bucaramanga, Jaime Andrés Beltrán, se pronunció sobre los recientes disturbios ocurridos en un partido entre Atlético Nacional y Junior, enfatizando en la necesidad de endurecer las medidas de seguridad para prevenir que delincuentes se camuflen como hinchas y perturben el orden en los estadios. A través de su cuenta en la red social X, Beltrán expresó que "es necesario hacer la vida imposible a los delincuentes disfrazados de hinchas" y afirmó que en Bucaramanga se han tomado decisiones concretas para garantizar la seguridad en eventos deportivos.
Como parte de estas iniciativas, la administración local ha implementado una prueba piloto en el estadio Américo Montanini, con el uso de cámaras de reconocimiento facial para detectar y restringir el ingreso de personas con antecedentes delictivos o comportamientos problemáticos. Los resultados preliminares de esta medida han sido contundentes: se identificaron a cinco personas, de las cuales una tenía brazalete de detención domiciliaria y otras cuatro tenían órdenes de captura vigentes.
Además, gracias a esta tecnología, se impidió el acceso de 14 personas que representaban un riesgo para la seguridad durante el evento. "A los criminales que se camuflan entre barras para hacer de las suyas, al Montanini que ni se acerquen", advirtió el alcalde Beltrán, subrayando que la tecnología y el control minucioso serán pilares en su estrategia para mantener la tranquilidad en el estadio.
El alcalde destacó la importancia de esta herramienta tecnológica, que fue puesta a prueba durante un reciente encuentro deportivo del Atlético Bucaramanga. En dicho evento, uno de los individuos identificados, que llevaba brazalete de detención domiciliaria, fue sorprendido asistiendo al partido como si no tuviera restricciones legales. "Identificamos en la prueba piloto a cinco personas. Uno con brazalete de detención domiciliaria, celebrando el triunfo del Bucaramanga, y cuatro con órdenes de captura", comentó Beltrán.
Asimismo, se reforzó la seguridad en el entorno del estadio con la finalidad de evitar que personas con antecedentes judiciales o comportamientos violentos puedan ingresar y generar situaciones de riesgo. El alcalde enfatizó que estas medidas no solo aplican para los partidos de fútbol, sino también para cualquier evento masivo que se realice en la ciudad, con el fin de preservar el estadio como un espacio seguro y apto para el disfrute de toda la comunidad.
Beltrán concluyó que los incidentes violentos en otros estadios del país, como los recientes desmanes en Medellín, demuestran que no basta con la presencia policial para garantizar la seguridad; se requiere también de tecnologías avanzadas que permitan identificar y sancionar a quienes actúan al margen de la ley. "Vamos a ser exigentes porque el espectáculo del fútbol no debe ser un hecho de lamentar", puntualizó.
