Ciudad de Bobo Burro Barril a Bobo Burro Carril

Resumen

El transporte masivo en Bucaramanga está marcado por problemas de planificación y ejecución, dejando un sistema ineficaz. Se sugiere un Distrito Metropolitano para unificar la administración y fomentar el desarrollo urbano sostenible.

Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
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Ciudad de Bobo Burro Barril a Bobo Burro Carril

Por: Nelson Rico Cañas*

Da ansiedad ver a un político cualquiera, desde alguna ciudad del mundo, mostrar con entusiasmo un sistema de transporte masivo eléctrico y sobre rieles, mientras dice que “Bucaramanga se merece uno igual, desde Piedecuesta hasta el norte de la ciudad, y otro hasta Girón”.

Si algo nos acercaba al concepto de ciudad moderna era precisamente un sistema de transporte masivo. Sin embargo, en nuestro caso, nació muerto desde el mismo diagnóstico: mala planificación, pésima ejecución y funcionamiento —y un sistema de recaudo— necrofílico.

Ahí está el portal "Papi quiero piña", hoy convertido en un gran hueco. Su construcción inconclusa dejó a Metrolínea un pasivo superior a los 240.000 millones de pesos con la firma Urbanas. ¡Vea pues esa joya! Hoy, sus estaciones están vandalizadas y lo peor es que todo ocurrió frente a nuestras narices... y nadie hizo nada. ¿Y eso que somos los bravíos santandereanos?

¿Dónde están los buses? ¿Qué pasó con el patio-taller? Y ahora el Gobierno Nacional plantea un tranvía... ¿Será con cuatro reformas tributarias más, o con los mismos diseñadores del “tren” de Buenaventura al Caribe?

Lo más grave del asunto es que el carril exclusivo de Metrolínea, hoy sin buses, tampoco puede ser utilizado por otros vehículos. Eso sí, está disponible para retenes de tránsito y policía. ¡No jodas! Mientras tanto, el área metropolitana está completamente colapsada por el exceso de vehículos.

Por otra parte, otro símbolo de progreso urbano —a mi juicio— es la escultura de la "Mujer de pie desnuda" del maestro Fernando Botero. Pero aquí también es vandalizada cada vez que una recua de desadaptados decide pintarle las uñas o llenarla de notas adhesivas.

¡Qué orgullo fue llegar al aeropuerto de Palma de Mallorca y encontrarse con la escultura "Mujer recostada"! O saber que la cadena canadiense Four Seasons compró 24 obras de Botero para exponerlas en sus principales hoteles alrededor del mundo. Y aquí, ¿qué nos molesta? ¿Será el sobrepeso de la figura y que algunos quieren volverla fit?

No quiero ni imaginar el caos vehicular que viviremos en diez años, igual que Bogotá, hablando de tranvía 2.0 o buses eléctricos 4.0, pero bajo otro político (o peor, bajo el mismo). La ciudad no tiene espacio para nuevas vías, mucho menos para ampliarlas. ¿Qué será lo próximo, pico y placa de 4 días a la semana?

En mi opinión, ha llegado la hora de pensar en la creación de un Distrito Metropolitano. Así podríamos evitar esos costosísimos cargos administrativos repartidos entre cuatro municipios, con casi 80 concejales y cuatro alcaldes.

Un distrito permitiría estructurar una ciudad sostenible en el tiempo: con tránsito, servicios, educación, deporte, planificación centralizada y alta tecnología. Bucaramanga perdió la oportunidad de atraer medianas y grandes industrias. Es hora de reenfocar la ciudad hacia el desarrollo, sin linderos ni obstáculos políticos.

Solo con una administración unificada, que dirija y proyecte un gran desarrollo regional, lograremos un verdadero sistema de transporte masivo. Y podremos convertir a la Bonita en la ciudad que realmente deseamos, sin tener que envidiar a las grandes ciudades del mundo. ¡Soñar no cuesta nada decía el político! “La verdad es la verdad, y no se puede medir con reglas ajenas a ella”, La ciudad y los perros, Mario Vargas Llosa. *Ingeniero Civil

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