Resumen
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
En el lodazal de la infinita corrupción que sacude a Colombia aparecen todos los días nuevos escándalos en el manejo de los recursos públicos y la incompetencia de las nuevas autoridades envueltas en el torbellino de la politiquería izquierdista, marxista y leninista, que pasan por alto los gravísimos acontecimientos de la vida nacional, desarmando a las fuerzas militares y de policía que se han convertido en víctimas de los grupos criminales que ahora ejercen dominio territorial, con la complicidad del gobierno.
Es una vergüenza ante el mundo que los directores de las cárceles del país estén amenazados de muerte porque la Guardia Penitenciaria no puede protegerlos. Es una vergüenza que las fuerzas militares y de policía no puedan controlar el orden público en las universidades públicas y en los colegios oficiales, donde debería aplicarse e imponerse la disciplina militar. Es una vergüenza ante el mundo que los peores delincuentes de la guerrilla y el narcotráfico sean escogidos, mediante decreto presidencial, como ‘GESTORES DE PAZ’.
‘El diablo haciendo hostias y los pájaros tirándole a las escopetas’. En medio de la anarquía, que se ha multiplicado desde la instalación del nuevo gobierno del presidente Petro, la Universidad Nacional de Colombia permanece en guerra contra la elección institucional del nuevo rector, porque los encapuchados – que son unos delincuentes – pretenden que les nombren a otro bandido como primera autoridad del claustro.
En unas declaraciones concedidas a la Revista Semana por el alcalde de Bucaramanga, Jaime Andrés Beltrán Martínez, advierte que, en conversaciones callejeras con honorables ciudadanos, se mira con estupor la crisis de autoridad y la ola de impunidad que preocupa a todos los sectores sociales y políticos del país. En su condición de primera autoridad de la capital santandereana, el alcalde Beltrán ha tenido que enfrentar con todo rigor la invasión de venezolanos, muchos de ellos delincuentes que han huido de su país, a delinquir en nuestro territorio.
La gente se está armando con elementos de defensa personal para combatir a los ladrones, a los extorsionistas y a los atracadores, esperando que los jueces de la república apliquen el código penal con toda severidad. En Bucaramanga están ocurriendo delitos atroces, varios casos de feminicidio y en la mayoría de los casos, son migrantes venezolanos que hacen parte de grupos criminales preparados en el vecino país. El alcalde de Bucaramanga ha ordenado el destierro de elementos extranjeros con inmenso prontuario criminal, porque ese fue uno de sus compromisos de campaña. Mano fuerte contra la delincuencia y eficacia de la justicia para volver disfrutar las calles, parques y avenidas, que hace varios años hacían parte de los encantos de la ‘Ciudad Bonita’.
