Resumen
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)En el marco del Día Mundial del Cerebro, que se conmemora este 22 de julio, surge una oportunidad para explorar cómo este órgano vital influye en nuestras emociones y comportamientos. Durante la reciente Copa América, los colombianos vivieron un torbellino emocional, desde la euforia de los goles hasta la frustración por decisiones arbitrales.
El neurólogo Leonardo Palacios, profesor de la Escuela de Medicina y Ciencias de la Salud de la Universidad del Rosario, destaca que “el cerebro es el centro de todas nuestras emociones. En el contexto de la Copa América, los espectadores experimentaron una gama amplia de respuestas emocionales, que incluyen alegría, enojo y tristeza, como resultado directo del desempeño de la selección nacional”.
Palacios explica que cada gol marcado por el equipo colombiano desencadenó una serie de reacciones químicas en el cerebro, liberando dopamina y generando sensaciones de felicidad y exaltación. En contraste, las derrotas o decisiones cuestionables provocaron la liberación de cortisol y adrenalina, llevando a sentimientos de desazón y enojo.
“El impacto emocional de estos eventos deportivos es profundo. El cerebro, al enfrentar estas emociones intensas, puede desactivar temporalmente la corteza prefrontal, lo que afecta la capacidad de razonamiento y control de impulsos”, añade el especialista.
Además, el neurólogo subraya la importancia de la regulación emocional. “Desarrollar habilidades para gestionar nuestras emociones es crucial. La inteligencia emocional nos ayuda a enfrentar eventos adversos y a mejorar nuestra resiliencia”, comenta Palacios. Esta capacidad es particularmente importante durante la adolescencia, una etapa caracterizada por intensos cambios cerebrales y hormonales que pueden aumentar la vulnerabilidad a estados de ansiedad y depresión.