Conductor recibió disparo en la espalda tras salir de un burdel
Resumen
Un conductor en Bucaramanga fue herido por un disparo desde su asiento trasero. Sorprendentemente, decidió no denunciar ni señalar al responsable, dejando a los investigadores en desconcierto. Las autoridades barajan la hipótesis de un manejo imprudente del arma.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)Una madrugada en Bucaramanga terminó marcada por el misterio, la lealtad y el silencio. Un conductor de plataformas fue herido por la espalda con un disparo proveniente del asiento trasero de su propio vehículo. Aunque el proyectil lo dejó al borde del desmayo, eligió callar. No denunció, no señaló a nadie y, pese a conocer al responsable, decidió guardar silencio.
El hecho ocurrió hacia las dos de la madrugada del miércoles. Horas antes, el hombre compartía tragos y risas en una casa de lenocinio del barrio San Francisco junto a varios conocidos. Cuando el lugar cerró, se ofreció a llevarlos a casa, un gesto de amistad que terminó en tragedia. Partieron juntos, con la música aún resonando y el olor a licor impregnado en el aire.
Al llegar a la carrera 30 con avenida Quebradaseca, todo cambió. Un fogonazo iluminó el interior del carro y el estruendo del disparo rompió el silencio de la madrugada. “Sentí el impacto en la espalda y todos los que iban atrás se bajaron y corrieron”, alcanzó a contar el conductor más tarde.
Gravemente herido, logró pedir ayuda. Solo uno de sus compañeros permaneció a su lado y lo llevó al Hospital Universitario de Santander (HUS). Allí, los médicos confirmaron que la bala había entrado por el lado izquierdo del tórax posterior. Milagrosamente, el proyectil no comprometió órganos vitales y su vida quedó fuera de peligro.
A pesar de todo, el hombre no quiso señalar a nadie. Dijo saber quién disparó, pero prefirió guardar el nombre. Su silencio, más elocuente que cualquier testimonio, ha desconcertado tanto a los investigadores como a quienes lo conocen. Por ahora, las autoridades manejan la hipótesis de una “manipulación imprudente del arma dentro del vehículo”.