Resumen
David Beckham ha demandado a Mark Wahlberg y su grupo de inversión por pérdidas de más de 10 millones de euros en la marca de fitness F45, alegando que se le entregaron acciones prometidas tarde cuando su valor había caído drásticamente. Los acusados han pedido al juez desestimar las acusaciones.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
David Beckham ha presentado una demanda contra Mark Wahlberg y su grupo de inversión, alegando pérdidas de más de 8,5 millones de libras (unos 10 millones de euros) en un acuerdo con la marca de fitness F45. La disputa se centra en un desacuerdo sobre acciones prometidas que Beckham afirma se le entregaron demasiado tarde, cuando su valor había disminuido significativamente.
La leyenda del fútbol inglés se convirtió en embajador global de F45 en noviembre de 2020, promocionando la marca en sus redes sociales. Sin embargo, Beckham alega que se le prometieron acciones a principios de 2022, pero su emisión se retrasó y, cuando finalmente se entregaron, su valor había caído drásticamente.
Los acusados, incluidos Wahlberg y los fundadores de F45, han solicitado al juez que desestime las acusaciones, calificándolas de "conducta fraudulenta". En respuesta, los representantes legales de Beckham han detallado las promesas incumplidas y las considerables pérdidas económicas sufridas por el ex futbolista debido a la manipulación del acuerdo de acciones.
Este conflicto legal se produce en un momento en que F45 ha experimentado dificultades financieras, con el precio de sus acciones cayendo significativamente desde su lanzamiento inicial. La empresa también ha cerrado franquicias en varios países.
La relación entre Beckham y Wahlberg, una vez marcada por la amistad y la colaboración profesional, se ve empañada por este conflicto legal, que destaca los riesgos y desafíos en el mundo de los negocios de fitness y las inversiones de celebridades.
Mark Wahlberg se convirtió en accionista minoritario de F45 en 2019 y su interés en el sector del fitness motivó la adquisición de acciones. Sin embargo, esta disputa en los tribunales plantea interrogantes sobre las prácticas empresariales y la fiabilidad de las promesas hechas en el ámbito de las inversiones y colaboraciones entre celebridades y marcas.
