Resumen
La investigación del asesinato de Juan Felipe Rincón se complica tras la desaparición de un testigo clave. Este testigo, crucial para confirmar la hipótesis de una trampa, solicitó protección y ahora es imposible localizarla, lo que aumenta las preocupaciones por su seguridad.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)El asesinato de Juan Felipe Rincón Morales, hijo del general William Rincón, Inspector de la Policía Metropolitana de Bogotá, ocurrido el 24 de noviembre en el barrio Rafael Uribe Uribe, ha sido uno de los casos más impactantes y vigilados por las autoridades en Colombia. El crimen, que dejó a la familia Rincón sumida en el dolor, continúa siendo objeto de investigaciones intensas, pero ahora se ha sumado un giro preocupante: la desaparición de un testigo clave en el caso.
La joven, que se encontraba con Juan Felipe al momento de los hechos, había expresado su disposición a colaborar con la justicia, aportando información vital que podría confirmar la hipótesis de que el asesinato fue una trampa en la que cayó la víctima. Según informes de la revista Semana, la menor había solicitado protección debido al temor por su seguridad, pero tras manifestar su interés en ayudar, se ha vuelto imposible localizarla.
Juan Felipe Criollo, abogado del Inspector de la Policía, expresó su preocupación por la desaparición de la joven, señalando que las autoridades no han podido dar con su paradero, lo que ha incrementado los temores sobre su bienestar. "Es fundamental que la menor aporte su testimonio en el proceso investigativo para esclarecer los hechos que rodean la muerte de Juan Felipe", comentó Criollo.
Mientras tanto, la Fiscalía General de la Nación continúa avanzando en la investigación, revelando detalles clave sobre el arma utilizada en el crimen. El ente investigador identificó que la única arma apta para disparar en la escena del crimen fue una SIG SAUER modelo SP2022 calibre 9x19mm, que presuntamente pertenecía al escolta del fallecido, un policía activo que aparece en un video viral apuntando contra el grupo de jóvenes involucrados en la riña. Este detalle coincide con las declaraciones de Andrés Camilo Sotelo Torres, quien fue capturado y señalado de asesinar a Juan Felipe. Sin embargo, Sotelo se declaró inocente, afirmando que el disparo mortal fue efectuado por el escolta, ya que la arma que él portaba era de balín.
Según las investigaciones del CTI, el arma de Sotelo no estaba en condiciones de disparar, lo que ha sumado más dudas y complicaciones al caso. La jornada trágica comenzó cuando Juan Felipe, acompañado de su escolta y una joven, llegó al barrio donde una confrontación con un grupo de personas, aparentemente familiares de la joven con la que se encontraba, terminó en el fatal tiroteo. Unas cámaras de seguridad captaron parte de la disputa, pero el misterio en torno a la identidad del autor del disparo sigue sin resolverse.