Resumen
La política del gobierno del presidente Gustavo Petro Urrego ha causado el colapso de hospitales y clínicas privadas en Colombia, lo que resulta en la suspensión de servicios cruciales de salud, y una preocupante escasez de medicamentos de alto costo.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)Hospitales y clínicas están en quiebra
La crisis provocada por el gobierno del presidente Gustavo Petro Urrego y su ministro de salud, Guillermo Alfonso Jaramillo, para acabar con las empresas privadas prestadoras de servicios de salud, ha provocado el colapso de clínicas y hospitales, que han tenido que suspender sus servicios de hospitalización, cirugías y suministro de medicamentos. La Nueva EPS habría ocultado deudas consentidas por cinco billones quinientos mil millones de pesos hasta el 31 de diciembre del año pasado. Recientemente el superintendente de Salud, Luis Carlos Leal, compartió los primeros hallazgos tras la intervención en Nueva EPS y Sanitas.
La quiebra de los hospitales y clínicas del país obedece a la suspensión de los giros que debía realizar la nación cada mes a las instituciones asistenciales legalmente constituidas y que contaban con el apoyo del capital privado para su propia supervivencia. Para los médicos y empleados auxiliares la preocupación es mayor por la falta de medicamentos de alto costo para atender a millares de personas que necesitan prolongados tratamientos, especialmente en los pabellones de cancerología, cardiología y enfermedades huérfanas. Millares de personas hacen fila en las ciudades capitales como Bogotá, Medellín, Barranquilla, Bucaramanga, Cali y en ciudades intermedias como El Socorro, Barrancabermeja y San Gil, todos los días, desde las horas de la madrugada en busca de atención de los facultativos.