Doble homicidio por sicariato en San Rafael de Chucurí
Resumen
Reyes Lozano Carrillo y su hijo Joeer Lozano Cortés fueron asesinados en San Rafael de Chucurí, impactando profundamente a la comunidad local. Se investigan posibles vínculos con grupos subversivos y se exige mayor seguridad estatal para prevenir futuros actos violentos.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)En un lamentable suceso que sacude la región, sicarios asesinaron a Reyes Lozano Carrillo y a su hijo Joeer Lozano Cortés en San Rafael de Chucurí, Distrito de Barrancabermeja.
El doble homicidio ha dejado consternada a la comunidad del corregimiento de San Rafael de Chucurí, donde ambos eran muy reconocidos y apreciados por su liderazgo y compromiso social.
Los hechos se registraron el martes 4 de marzo, durante el mediodía, cuando padre e hijo se desplazaban en un vehículo por la vía que atraviesa la vereda Pitalito del municipio de Puerto Parra.
Esta ruta, que une diversas zonas del territorio, se convirtió en el escenario de un acto violento y brutal.
De acuerdo con información preliminar facilitada por la Fuerza Pública, sujetos armados interceptaron el vehículo y atacaron a las víctimas sin contemplación alguna.
Los disparos ejecutados dejaron los cuerpos tendidos en la calzada, lo que obligó a una inmediata respuesta de las autoridades.
Eduardo Ramírez Alipio, subsecretario de Seguridad de Barrancabermeja, afirmó: “Lamentamos profundamente este doble homicidio”.
El funcionario precisó que el incidente ocurrió en una zona que conduce desde el corregimiento hacia el sector de Las Montoyas, en la vereda Pitalito de Puerto Parra, lo que dificultó las operaciones de control territorial en el lugar.
Reyes Lozano Carrillo se destacó como un líder influyente en la comunidad de San Rafael de Chucurí, y su muerte representa una pérdida irreparable para el tejido social local.
Los cuerpos de las víctimas fueron trasladados en chalupa hasta el casco urbano de Barrancabermeja, donde agentes de la Sijin realizaron una inspección técnica alrededor de las 8:00 de la noche, para recabar pruebas que serán fundamentales en la investigación.
Las autoridades han iniciado las pesquisas para esclarecer la autoría del crimen. Se investiga con rigor si existe alguna vinculación entre el ataque y la actuación de grupos subversivos en la zona. La operación contó con la coordinación entre las fuerzas de seguridad y la administración local, en un esfuerzo decidido por restablecer el orden y garantizar la protección de la ciudadanía. La comunidad reclama respuestas y mayor presencia del Estado para prevenir nuevos actos de violencia, mientras se intensifica la búsqueda de justicia por este atroz crimen.
Las investigaciones continúan con determinación. La sociedad exige hoy respuestas claras y acciones contundentes para evitar que hechos similares vuelvan a ocurrir.