Drake vuelve a la cima de las listas con “Nokia” y reaviva su rivalidad con Kendrick Lamar

Drake ha vuelto a posicionarse como líder indiscutible en el mundo del hip-hop. Su más reciente sencillo, “Nokia”, desbancó a “Not Like Us” de Kendrick Lamar del primer puesto en la lista oficial de sencillos de hip-hop y R&B del Reino Unido, reavivando una de las rivalidades más intensas del panorama musical contemporáneo.

Este sorpresivo cambio en el ranking no solo subraya la fuerza con la que “Nokia” ha captado a la audiencia, sino que también evidencia la vigencia de la competencia entre ambos artistas, que desde hace años disputan la supremacía musical tanto en los charts como en la cultura popular. Según Forbes, esta rivalidad —más implícita en los últimos tiempos, pero no menos feroz— ha mantenido divididos a sus seguidores y ha sido motivo de análisis constante en la prensa especializada.

El conflicto entre Drake y Kendrick Lamar ha evolucionado con los años. Lo que empezó como un enfrentamiento directo, marcado por menciones y críticas cruzadas en sus canciones, se ha transformado en una silenciosa lucha por el dominio en las listas de éxitos globales. Cada lanzamiento, cada colaboración y cada número uno alimentan una narrativa que los mantiene en el centro de la atención mediática.

El éxito de “Nokia” fue especialmente notorio en el Reino Unido, donde escaló rápidamente posiciones hasta alcanzar la cima. La canción no solo se impuso dentro del género hip-hop y R&B, sino que también irrumpió en la lista general de sencillos del país, ascendiendo del puesto 12 al 10, una señal del amplio alcance de Drake más allá de su nicho. Este logro marca su decimosexto número uno en la lista oficial del Reino Unido, reafirmando su posición como uno de los artistas más consistentes y comerciales del género.

Drake está a punto de alcanzar un hito que pocos han logrado: sumar 100 sencillos en el Top 10 del mismo género. Esta racha de éxitos sostenidos habla de una carrera construida no solo sobre talento, sino sobre una extraordinaria capacidad de adaptación al cambiante mercado musical.

Por el contrario, Kendrick Lamar —aunque celebrado por la crítica y galardonado con premios como el Pulitzer— ha enfrentado mayores retos para consolidar su dominio en el ámbito comercial británico. Si bien su último álbum GNX ha cosechado elogios y producido colaboraciones exitosas como “Luther”, junto a SZA, que alcanzó el primer lugar, muchas de sus canciones más influyentes no han logrado ese mismo impacto en las listas del Reino Unido.

La pugna entre Drake y Lamar representa dos formas distintas de conquistar el éxito: uno con una fórmula comercial certera y una conexión casi automática con el gran público, y el otro con una propuesta lírica y artística más compleja, admirada por su profundidad pero menos masiva en términos de cifras.

Así, mientras “Nokia” continúa consolidándose como un fenómeno musical en múltiples mercados, la competencia entre ambos íconos del hip-hop sigue siendo uno de los grandes motores del género. Una rivalidad silenciosa, pero encendida, que impulsa a ambos artistas a mantenerse en lo más alto... o a pelear por regresar.