Egipto revela estatuas colosales restauradas de un faraón
Egipto reveló este domingo la renovación de dos colosales estatuas de un destacado faraón en la ciudad sureña de Luxor, el último de los eventos arqueológicos del gobierno que buscan atraer más turistas al país.
Las gigantescas estatuas de alabastro, conocidas como los Colosos de Memnón, fueron reensambladas en un proyecto de renovación que duró aproximadamente dos décadas. Representan a Amenhotep III, quien gobernó el antiguo Egipto hace unos 3.400 años.
“Hoy estamos celebrando, de hecho, la finalización y la erección de estas dos estatuas colosales”, declaró Mohamed Ismail, secretario general del Consejo Supremo de Antigüedades.
Ismail comentó que los colosos son de gran importancia para Luxor, una ciudad conocida por sus antiguos templos y otras antigüedades. También son un intento de "revivir cómo se veía este templo funerario del rey Amenhotep III hace mucho tiempo", expresó Ismail.
Amenhotep III, uno de los faraones más destacados, gobernó durante el Nuevo Reino, una época de 500 años que fue la más próspera para el antiguo Egipto. El faraón, cuya momia se exhibe en un museo de El Cairo, gobernó entre 1390 y 1353 a.C., un período pacífico conocido por su prosperidad y grandes construcciones, incluyendo su templo mortuorio, donde se encuentran los Colosos de Memnón, y otro templo, Soleb, en Nubia.
Reconstrucción
Los colosos fueron derribados por un fuerte terremoto alrededor del año 1200 a.C. que también destruyó el templo funerario de Amenhotep III, apuntó Mohamed Ismail, secretario general del Consejo Supremo de Antigüedades.
Fueron fragmentados y en parte extraídos, con sus pedestales dispersos. Algunos de sus bloques fueron reutilizados en el templo de Karnak, pero los arqueólogos los trajeron de vuelta para reconstruir los colosos, según el Ministerio de Antigüedades.
A finales de la década de 1990, una misión egipcio-alemana, presidida por la egiptóloga alemana Hourig Sourouzian, comenzó a trabajar en el área del templo, incluyendo el ensamblaje y la renovación de los colosos.