El dólar sufre su peor año en décadas y genera alarma entre inversionistas

La moneda estadounidense está atravesando uno de sus peores momentos en décadas. En lo corrido de 2025, el índice del dólar, que mide su valor frente a seis divisas principales, ha caído casi un 10 %, ubicándose en su punto más bajo desde 2022. Aunque las acciones se han recuperado desde los mínimos de abril y los bonos se mantienen estables, el dólar ha seguido una trayectoria descendente, lo que ha encendido las alarmas en los mercados financieros internacionales.

Durante la segunda presidencia de Donald Trump, se esperaba que las políticas de recorte de impuestos y los aranceles comerciales fortalecieran el dólar al estimular el crecimiento interno y reducir la demanda de importaciones. Sin embargo, la realidad ha sido otra: la incertidumbre generada por los cambios constantes en la aplicación de los aranceles ha debilitado la confianza en la economía estadounidense y ha afectado negativamente la percepción del dólar como refugio seguro.

Barry Eichengreen, economista de la Universidad de California en Berkeley, explicó a CNN que la incertidumbre es uno de los factores que más afecta el valor de una moneda. “A los inversionistas no les gusta la incertidumbre”, afirmó, señalando que la volatilidad política actual ha afectado más al dólar que a otras divisas, como el euro, que ha ganado un 11,5 % en lo que va del año.

Aunque un dólar débil puede favorecer a los exportadores y a las empresas con operaciones en el extranjero, también implica mayores costos de financiamiento para el gobierno y los consumidores estadounidenses. Esto se debe a que una menor demanda de dólares reduce el atractivo de la deuda estadounidense, lo cual podría forzar un aumento en los rendimientos de los bonos del Tesoro.

Además, la caída del dólar refleja una crisis de confianza más profunda en el liderazgo económico de Estados Unidos. Arun Sai, estratega de Pictet Asset Management, considera que la ambigüedad en la política arancelaria de Trump ha dañado la credibilidad del país como destino principal del capital global. “Está siendo cuestionada la noción de que EE.UU. es el refugio por defecto del mundo”, advirtió.

Aunque el dólar sigue siendo la divisa más utilizada en el comercio internacional, expertos como Francesco Pesole, de ING, advierten que su hegemonía podría comenzar a declinar más rápidamente de lo previsto. Para los inversionistas, este nuevo escenario abre oportunidades en los mercados europeos e internacionales, que se perfilan como alternativas más estables frente a la incertidumbre estadounidense.