Resumen
La Comunidad Terapéutica Fortaleza en la Cárcel de Palogordo ayuda a los reclusos con problemas de drogas a través de la terapia cognitivo-conductual. Aunque ofrece servicios valiosos, carece de visibilidad y necesita más plazas para los residentes.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)El pasado 15 de julio la Comunidad Terapéutica Nuevos Horizontes que funciona en un Patio de la Cárcel Modelo de Bucaramanga, cumplió 24 años de existencia, fue creada el 15 de julio de 2000, tiene el slogan, ‘Rumbo a la Excelencia’.
Pues en la Cárcel de Mediana y Máxima Seguridad de Palogordo, en Girón, también hay funciona una comunidad terapéutica llamada Fortaleza, por eso digo que en Palogordo, hay una Fortaleza.
Esta comunidad terapéutica fue creada mediante Resolución No. 000268 del 11 de marzo de 2008, o sea, ya tiene 16 años de funcionamiento, funciona en uno de los Patios de la Cárcel que tiene una capacidad máxima de 42 internos, en la actualidad hay 33 Residentes.
Esta Comunidad está dirigida en la actualidad por el Psicólogo Dragoneante Henry Rueda. Su misión es, prestar el servicio de atención a internos con problemas potenciales o reales de uso y abuso de sustancias psicoactivas.
En la Comunidad Fortaleza se emplea el método Psicológico de la Terapia Cognitivo – Conductual, TCC, para ayudar a los Residentes en su Proceso de abandono de sustancias Psicoactivas. La TCC se centra en identificar y modificar los patrones de pensamiento y comportamiento disfuncionales que contribuyen al consumo de drogas. A través de diversas técnicas y ejercicios, los Terapeutas trabajan con los Residentes para desarrollar habilidades de afrontamiento más saludables, mejorar su autoeficacia y fomentar una visión más positiva y realista de sí mismos y su entorno. Este enfoque integral y estructurado ha demostrado ser efectivo en la reducción de la recurrencia del consumo y en la promoción de una vida libre de adicciones.
Esa es la descripción científica de la forma como actúa esta Comunidad que al igual que Nuevos Horizontes, no emplea drogas en el tratamiento de sus Residentes.
Esta es una labor loable que debe ser mencionada y por eso utilizo hoy el espacio de mi Columna para hacer un homenaje a esta Comunidad que no ha tenido mucha difusión seguro porque el número de sus Residentes es relativamente bajo, debería pensarse en la ampliación de los cupos para que hayan más Residentes, es bueno informar que en esta Comunidad se reciben condenados y sindicados sin limitantes, para su ingreso a la Comunidad deben cumplir una serie de requisitos, entre ellos, hacer algo inicial que se llama Pre- Acogida.
Repito, esta es una labor loable, felicitaciones al Dragoneante Henry Rueda, a las Directivas de la Cárcel, al Capitán Eleasid Durán quienes con su esfuerzo y su respaldo permiten esta lucha tan dura contra este flagelo que ha hecho y sigue haciendo tanto daño a nuestra sociedad, especialmente a nuestros jóvenes.
La gran mayoría de personas presas son adictas, no solo a las drogas, sino a cualquier otro tipo de vicios. Estas personas que dirigen esta Comunidad manejan dos situaciones complicadas, las dos condenas que tienen sus Residentes, la Condena Penal por la que están en la cárcel y la condena de la adicción, que seguramente los llevó a cometer sus delitos, es algo muy difícil porque además como he dicho, no utilizan drogas para su tratamiento.
Mis respetos a todas estas labores, eso es humanizar las cárceles, eso es hacer una prisión digna y humana. Seguiré, si Dios me lo permite, escribiendo sobre temas carcelarios positivos como este. Voy Con Toda. Amén.