Resumen
La deuda hospitalaria en Colombia aumentó a $16,8 billones en 2023, con el 54% en mora. Las EPS del régimen contributivo son los mayores deudores. La Asociación Colombiana de Hospitales propone un fondo de garantías para cubrir las deudas.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
Según la Asociación Colombiana de Hospitales y Clínicas (Achc) y sus resultados del estudio de cartera número 51, se revela un aumento en la deuda con estas entidades. La deuda de 221 instituciones hospitalarias reportadas pasó de $16,09 billones en junio de 2023 a $16,8 billones en diciembre del mismo año, lo que representa un incremento de aproximadamente $705.000 millones y un 4,38% en el monto de la cartera. Además, el 54% de la deuda está en mora (más de 60 días).
El estudio señala que las EPS del régimen contributivo representan algo más del 50% de la deuda total, alrededor de $8,4 billones, seguidas por las EPS del régimen subsidiado, que abarcan cerca del 23,2% del total, es decir, unos $3,8 billones. Los deudores del Estado representan aproximadamente el 8,8% del total, y las aseguradoras del Seguro Obligatorio de Accidentes de Tránsito (Soat) concentran el 3%.
La Nueva EPS encabeza la lista de mayores deudoras del régimen contributivo con aproximadamente $2,8 billones y una morosidad del 44,7%, seguida por EPS Sanitas con $985.900 millones y una morosidad del 43,3%, y EPS Sura con $596.300 millones y una morosidad del 26,7%.
La asociación subraya la necesidad urgente de implementar un fondo de garantías para mejorar la liquidez y cubrir las deudas de las entidades en liquidación. Afirma que este fondo podría derivar de cuentas como el Fondo de Salvamento y Garantías para el Sector Salud (Fonsaet) y el fondo de apoyo financiero y fortalecimiento patrimonial de las entidades del sector salud, existentes en la Adres, y alimentarse de recursos como el medio punto de IVA social creado en la reforma tributaria de 2016.
El gremio hospitalario a través de este estudio, envía un mensaje de urgencia y señala que la liquidez en la prestación de servicios de salud es esencial para cumplir con las obligaciones hacia el personal de salud y los proveedores, garantizando así la continuidad de los servicios con la calidad, seguridad y oportunidad necesarias.
