Resumen
San Gil enfrenta una grave crisis estructural con 14 viviendas en riesgo de colapso. A pesar de una orden judicial en 2024, la demolición aún no se lleva a cabo, lo que ha derivado en sanciones contra el alcalde. La intervención en el terreno desestabilizó las edificaciones.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
San Gil enfrenta una grave crisis estructural en el barrio El Vergel, donde una manzana completa de 14 viviendas está en riesgo inminente de colapso debido a fallas en el terreno. A pesar de una orden judicial emitida en 2024 que obligaba a la Alcaldía a demolerlas, el proceso sigue estancado, lo que ha derivado en sanciones contra el alcalde Edgar Orlando Pinzón Rojas.
El problema comenzó hace más de una década cuando se realizaron obras de colectores de aguas negras en la zona. Según el veedor ciudadano Marco Antonio Velásquez, estas intervenciones desestabilizaron el suelo al remover muros de contención sin reponerlos, lo que provocó desplazamientos de tierra y el progresivo deterioro de las viviendas. “Hoy prácticamente la manzana está destruida”, advirtió Velásquez.
El Juzgado Segundo Administrativo Oral del Circuito de San Gil determinó que la Alcaldía incumplió medidas cautelares previas, que ordenaban inspeccionar las edificaciones en riesgo y tomar acciones inmediatas para mitigar el peligro. Sin embargo, la única medida adoptada fue un precario cerramiento con cinta de peligro, lo que el juzgado consideró insuficiente.
Ante la falta de acción, el alcalde Pinzón Rojas fue sancionado con una multa equivalente a 20 salarios mínimos mensuales legales vigentes. El dinero deberá ser consignado al Fondo para la Defensa de los Derechos e Intereses Colectivos de la Defensoría del Pueblo en un plazo de 20 días hábiles.
La sanción ha sido remitida al Tribunal Administrativo de Santander para su revisión, mientras que los habitantes del barrio El Vergel esperan que esta medida obligue a la administración municipal a cumplir con la demolición antes de que ocurra una tragedia.
