Resumen
El rey maorí de Nueva Zelanda, Kīngi Tuheitia Pootatau Te Wherowhero VII, falleció a los 69 años tras una cirugía cardíaca. Su muerte ha causado tristeza en todo el país. Durante su reinado, trabajó por la equidad, justicia y preservación de la cultura maorí.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)Kīngi Tuheitia Pootatau Te Wherowhero VII, el rey maorí de Nueva Zelanda, falleció este viernes a los 69 años, poco después de someterse a una cirugía cardíaca. El líder indígena murió “en paz” rodeado de su familia, según confirmó un portavoz.
La muerte de Kīngi Tuheitia, quien recientemente celebró el 18º aniversario de su coronación, ha causado una profunda tristeza entre sus seguidores y en la nación entera. El primer ministro de Nueva Zelanda, Christopher Luxon, expresó su pesar desde Tonga, donde participaba en el Foro de las Islas del Pacífico: “Lamentamos profundamente la pérdida de Kīngi Tuheitia. Su compromiso inquebrantable con su pueblo y sus esfuerzos por preservar los valores y tradiciones del Kiingitanga han dejado una marca indeleble en nuestra nación”.
Kīngi Tuheitia fue el séptimo monarca del movimiento Kiingitanga, creado en 1858 para unificar a las tribus maoríes bajo un solo líder como respuesta a la colonización británica. Asumió el trono en 2006 tras la muerte de su madre, Te Arikinui Dame Te Atairangikaahu, quien también fue una figura destacada en la defensa de los derechos maoríes.
Durante su reinado, Kīngi Tuheitia representó a su pueblo en eventos internacionales, incluyendo la coronación del rey Carlos III y la reina Camila en Londres en 2023, y una audiencia con el papa Francisco en 2019. Su legado incluye un firme compromiso con la equidad y la justicia, y una visión para un futuro en el que todos sean tratados con dignidad y respeto.
La ex primera ministra Jacinda Ardern rindió homenaje al rey en redes sociales, destacando su defensa de los maoríes y su trabajo para promover la comprensión de la historia compartida de Aotearoa. “Querías que los niños, los jóvenes y los marginados tuvieran oportunidades y esperanza. Descansa en paz ahora”, escribió Ardern.
Dado que el cargo de monarca maorí no es hereditario, se espera que los líderes de las tribus asociadas al Te Kiingitanga anuncien pronto el sucesor de Kīngi Tuheitia antes de su entierro. Mientras tanto, Nueva Zelanda se prepara para despedir a una figura clave en la unidad y resistencia maorí.