Resumen
Denis Paola Agualimpia López robó y drogó a varias víctimas en Bogotá mientras fingía ser empleada doméstica. Usaba una identidad falsa y escopolamina para llevar a cabo sus delitos. Fue capturada por la policía tras varias denuncias.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
Denis Paola Agualimpia López sería la mujer que se hacía pasar como empleada doméstica y con identidad falsa robó y drogaba con escopolamina a las víctimas en Bogotá.
Esta peligrosa delincuente drogaba a los dueños de las casas dónde trabajaba y lo hacía luego de preparar exquisitos platillos, donde les ponía la escopolamina.
Todo salió a la luz y varias de sus víctimas contaron lo que les pasó, la policía la capturó. Eleonora Méndez, una de las tantas víctimas contó la pesadilla que vivió por culpa de esta mujer y narró como su vida estuvo en peligro.
Luego de este hecho aparecieron más denuncias y en el que se puede comprobar cual era su modus operandi. Lo más grave es que usaba sustancias muy peligrosas para drogar a las familias y así robar sus pertenencias.
“Su forma de hablar es educada y cordial con su ambiente de trabajo”, dijo la mujer y relató que ella y la niñera de su hija fueron escopolaminadas. Eleonora describió a la excelente empleada como amable, dulce y una buena cocinera.
Nadie sospechó nada. La dueña de casa se dejó sorprender por las habilidades culinarias y también por que al parecer era una 'buena cristiana'. Las cámaras de seguridad del conjunto residencial de la familia son pieza clave para las autoridades y poner tras las rejas a esta peligrosas delincuente.
Todo lo tenía planeado y fue el 18 de enero que cumplió su cometido, luego de varios días de prueba. Ese día llegó como siempre a su trabajo vestida de rojo y con un regalo para sus patrones en las manos y antes de acabar la jornada laboral quiso tener un gesto con los dueños de casi y preparó un 'pollo al wok, delicioso', según Eleonora "esta era su especialidad en la cocina, lo hacía muy bien".
Nadie sospechó que detrás de esa delicia culinaria, había una peligrosa criminal que en tres días logró conseguir la información que necesitaba y así ejecutar su plan. “Me sentí cansada y me fui a la habitación para clasificar la ropa. Llegó allá y le entregó las ropa para organizar al día siguiente. Allí empiezo a sentir aún más cansada”, narra la mujer víctima.
La dueña de casa no recuerda nada más y contó que tanto ella como la niñera fueron drogadas. Cuando Eleonora se despertó, los médicos le dijeron que llevaba varios días en UCI.
La delincuente, antes de cometer su fechoría apagó las cámaras de seguridad y llevó herramientas para violar la caja de seguridad. Justo ese día el esposo de Eleonora no estaba en la casa. Se robó las joyas pertenecientes a Eleonora y sus hijas. Pasadas las nueve de la noche y como lo muestran las cámaras de seguridad salió tranquila y como si nada hubiera pasado.
Nadie la requisó y consigo llevaba un bolso pequeño. Eleonora contó que estuvo en riesgo al igual que sus dos hijas de 2 y 3 años. “Mi vida estuvo en peligro y casi me mata”, concluye la mujer su testimonio.
