Resumen
Las fuerzas de seguridad de Ecuador responden a la violencia reciente con medidas drásticas, permitiendo el uso de armamento letal contra grupos terroristas. Las acciones resultaron en 329 detenciones y cinco sospechosos abatidos. El gobierno insiste en no negociar con criminales.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)En respuesta a los recientes actos de violencia que sacudieron a Ecuador, las fuerzas de seguridad ecuatorianas han tomado medidas drásticas. Tras los eventos del martes, donde bandas relacionadas con el narcotráfico irrumpieron en un canal de televisión y cometieron ataques violentos en diversas provincias, el presidente Daniel Noboa solicitó a las fuerzas armadas restablecer el orden.
Bajo el marco de un decreto presidencial, las fuerzas armadas y la Policía Nacional están facultadas para usar armamento letal contra los grupos identificados como terroristas. Jaime Vela, jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, enfatizó que este cambio en las reglas de enfrentamiento es significativo y está dirigido específicamente contra estos grupos, no contra la delincuencia común.
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La respuesta operativa resultó en la detención de 329 individuos, quienes enfrentarán cargos por terrorismo según lo anunciado por la Fiscalía ecuatoriana. Además, se informó sobre el abatimiento de cinco presuntos delincuentes y el rescate de 41 rehenes, así como la captura de 28 personas que se habían fugado.
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Los operativos se centraron principalmente en tres bandas criminales: Los Tigueros, Choneros y Los Lobos. Estas acciones se desarrollan en un contexto donde la crisis de seguridad en Ecuador se ha intensificado en los últimos años. En 2023, el país registró un récord histórico de homicidios, con un total de 7.878 casos, de los cuales solo se resolvieron 584.
El viceministro del gobierno, Estaban Torres Cobo, advirtió sobre las posibles consecuencias de esta operación, calificándola como una situación que podría resultar en un alto costo humano. Sin embargo, reiteró la determinación del gobierno de no negociar con las bandas criminales, subrayando la necesidad de abordar la situación de manera decisiva para garantizar la seguridad y el futuro del país.