ir al contenido

Gobernador invita al debate sobre el estado de las carreteras en Santander

‼️ Envianos tu denuncia o noticia
Versión Beta Reportar error

Resumen

El gobernador de Santander, Juvenal Díaz Mateus, llama a los parlamentarios del departamento a hacer un control político al Ministerio del Transporte y a la ANI, ante el mal estado de las carreteras. Critica su individualismo y distracción en intereses personales.

Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
Espacio Publicitario
+ Google Noticias
+ Canal WhatsApp

Los Senadores de la República y los Representantes a la Cámara por el departamento de Santander han sido requeridos por el señor gobernador de Santander, Mayor General (R) Juvenal Díaz Mateus, para que se haga el debate de control político al Ministerio del Transporte y a la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI), por el pésimo estado de las carreteras nacionales en esta zona del país. Siendo la bancada parlamentaria de Santander una de las más numerosas y costosas que tenga la democracia colombiana, el individualismo los tiene convertidos en un archipiélago de intereses personales, algunos de los cuales muy distraídos en negocios particulares, porque ya tienen tiempo de jubilación y, generalmente, porque conocen la marrullería que se aplica desde los despachos ministeriales y desde los institutos descentralizados del orden nacional contra los congresistas de provincia.

El año pasado se esperaban los informes de gestión de los señores congresistas santandereanos que brillaron por su silencio y que tienen la obligación legal y constitucional de informar cada año a sus electores sobre los resultados de su gestión parlamentaria, incluyendo el contenido de sus debates, los textos de los proyectos de ley y de las reformas constitucionales sometidas al examen del órgano legislativo del poder público. Un ilustre filósofo santandereano, el abogado Ciro Emilio López Mendoza, refiriéndose a las labores de algunos congresistas en el parlamento colombiano, decía conocer a muchos de sus colegas que ni siquiera pronunciaban un error de ortografía’.

Conocemos a varios congresistas santandereanos que gritan en los recintos palaciegos, en los salones de las comisiones legislativas, en las redes sociales y en las sesiones plenarias del hemiciclo del Capitolio Nacional, y se desgañitan adelantando juicios de valor sobre algunos de los señores ministros y gerentes de institutos descentralizados, pero se quedan callados a la hora de repartir la ‘mermelada’ que se volvió común para venderle el alma al diablo, a la hora de recibir cuotas de poder en el gobierno. Es vergonzoso el estado de abandono de la carretera troncal proveniente de Cúcuta, pasando por Pamplona hasta Bucaramanga para tomar la ruta de Floridablanca, Piedecuesta, Pescadero, Aratoca, San Gil, Socorro, Oiba, Barbosa, Puente Nacional, Chiquinquirá y Bogotá. El Río Manco, que nace en el Cerro de La Judía, en el Alto de Santa Bárbara, de la carretera Los Curos – Málaga, se llevó hace dos años uno de los dos carriles que pasaban por el sitio denominado ‘Las Quince Letras’ y no ha existido poder humano en el gobierno central, que realice las obras de mantenimiento de este corredor vial.

La construcción de los anillos viales de Bucaramanga hasta el sitio denominado El Buey; Floridablanca – Tona hasta el kilómetro dieciocho (18), San Gil- Pinchote, Socorro, Oiba y Barbosa, sigue en el limbo. La carretera Girón – Zapatoca, construida por iniciativa de la clase dirigente de la ‘Ciudad Levítica’, clama a gritos el bálsamo del pavimento y la pavimentación de la ‘Ruta del Petróleo’ entre Zapatoca y San Vicente de Chucurí, sigue abandonada a su suerte. Nos llenamos de orgullo y de gloria, por haber sido la cuna de la ‘Revolución de los Comuneros’ en 1781 y nos quedamos esperando la mano generosa del estado colombiano, que ha sido tan esquiva para la gente ‘arrecha’ (¿?) de Santander.

Más reciente