Resumen
El Gobierno de Colombia rechaza los bombardeos en Chocó en respuesta al paro armado del ELN, argumentando que comprometen la paz y la seguridad de los civiles. La crisis que enfrenta Chocó tras la violencia armada ha generado una grave crisis humanitaria.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
El Gobierno Nacional manifestó su rechazo a la reactivación de bombardeos en el departamento del Chocó, implementados en respuesta al paro armado declarado por el Ejército de Liberación Nacional (ELN). La Delegación de Paz del Gobierno expresó que esta estrategia militar no contribuye a la seguridad de la población civil ni a la construcción de la paz en la región.
En un comunicado oficial, el Ejecutivo insistió en la importancia de mantener el Cese al Fuego Bilateral Nacional y Temporal (CFBNT) como un pilar esencial para avanzar en el proceso de paz y evitar una escalada del conflicto. Según la Delegación de Paz, el cese al fuego es fundamental para construir una paz duradera.
Desde que el ELN declaró el paro armado, la región del Chocó ha enfrentado una crisis humanitaria, con más de 50.000 personas confinadas, interrupciones en la movilidad, el comercio y el acceso a servicios esenciales. La muerte de una niña de un año, entre otras tragedias, ha resaltado el impacto devastador de la violencia en la comunidad.
Diversos sectores han criticado la respuesta militar del gobierno y han abogado por una solución pacífica. Organizaciones de derechos humanos y líderes comunitarios han instado a retomar el diálogo y buscar alternativas que prioricen la seguridad y los derechos de la población civil.
La crisis en el Chocó sigue siendo alarmante, y el Gobierno enfrenta la presión de abordar la situación de manera efectiva, priorizando métodos que promuevan una paz sostenible.
