Resumen
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
La Corporación Regional para la Defensa de los Derechos Humanos (CREDHOS) ha emitido una grave advertencia sobre las crecientes amenazas que enfrentan organizaciones sociales y defensores de derechos humanos en la subregión del Sur de Bolívar. El 31 de julio de 2024, se difundió un comunicado a través de redes sociales, atribuido a la subestructura ‘Arístides Meza’ de las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC), que declara como objetivo militar a varias organizaciones sociales, campesinas, de víctimas y defensoras de derechos humanos de la región del Magdalena Medio.
En lo que va del año 2024, se han registrado amenazas sistemáticas por parte de grupos armados ilegales contra estas organizaciones y sus líderes mediante comunicados, panfletos, mensajería instantánea y llamadas telefónicas. Esto representa una violación grave de los derechos humanos de quienes defienden la vida y el territorio, agravando la crisis humanitaria que enfrenta la población civil debido a la intensificación de la violencia en la región.
CREDHOS ha manifestado su preocupación no solo por las amenazas contra la organización en sí, sino también por las amenazas directas a sus socios, Carlos Alberto Arévalo Junco, presidente del Comité de Derechos Humanos del Municipio de Santa Rosa del Sur, y José de los Santos Flórez, vocal del Consejo Administrativo de la Cooperativa Multiactiva Regional (COMUREGIÓN). Ambos líderes sociales son reconocidos por su incansable trabajo en la defensa de la vida y el territorio en el Sur de Bolívar.
La corporación hace un llamado urgente a las autoridades nacionales, departamentales y municipales para que implementen estrategias efectivas que protejan la vida, la permanencia en el territorio y el derecho a defender los derechos humanos. Asimismo, CREDHOS exige a los grupos armados ilegales que respeten a la población civil y cumplan con el Derecho Internacional Humanitario (DIH).
"La situación es insostenible. La comunidad y los defensores de derechos humanos viven bajo constante amenaza, lo que socava su labor fundamental en la defensa de la paz y los derechos fundamentales en el territorio," declaró un portavoz de CREDHOS.
Contexto de violencia
El Sur de Bolívar ha sido históricamente una zona afectada por el conflicto armado en Colombia, donde diversos grupos armados han ejercido control territorial, generando desplazamiento forzado, extorsiones y asesinatos selectivos. La actual situación refleja la persistente vulnerabilidad de las comunidades y el reto que enfrenta el Estado colombiano para garantizar la seguridad y el respeto por los derechos humanos.
Organizaciones internacionales de derechos humanos han expresado su preocupación por la situación en el Magdalena Medio. En particular, destacan la necesidad de un apoyo más decidido de la comunidad internacional para proteger a los defensores de derechos humanos y presionar a los grupos armados ilegales a cesar sus actividades violentas.
"La comunidad internacional debe prestar atención a esta crisis y actuar para proteger a aquellos que defienden la vida y el territorio en Colombia", afirmó un representante de Amnistía Internacional.
