Resumen
Wilfredo Cañizares de la Fundación Progresar alerta sobre el riesgo de que los desmovilizados en el Catatumbo sean instrumentalizados en operaciones militares, similar a la 'Operación Orión'. Se pide proteger sus derechos para evitar un escenario violento.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)En los últimos 15 días, 106 integrantes de grupos armados se han desmovilizado en el Catatumbo, generando preocupación entre defensores de derechos humanos ante la posibilidad de que esta región se convierta en el escenario de una nueva 'Operación Orión'.
Wilfredo Cañizares, director de la Fundación Progresar, advierte sobre la necesidad de extremar la precaución en el manejo de los desmovilizados por parte de la fuerza pública.
Según Cañizares, la situación en el Catatumbo podría derivar en una operación similar a la 'Operación Orión', donde los desmovilizados serían instrumentalizados para obtener información.
"Tenemos registros de 150 desmovilizados de las disidencias de las Farc que se han entregado a la fuerza pública. ¿Qué papel van a jugar esos actores? Si no somos vigilantes, puede ocurrir otra 'Operación Orión', ya no con paramilitares, sino con guerrilleros que están en manos de la brigada 30 del Ejército", señaló Cañizares.
El director de la Fundación Progresar agregó que existe la preocupación de que las fuerzas militares ingresen a la zona a disparar, seguidas por la Fiscalía y los organismos de seguridad, quienes utilizarían a los desmovilizados de las Farc para identificar a otros actores del conflicto.
Desde la Fundación Progresar, se ha solicitado que se respeten los derechos de las personas que han entregado sus armas y que no sean utilizadas en operaciones militares en la zona, ya que esto sería ilegal y pondría en riesgo la seguridad de las comunidades.
Por su parte, Enrique Pertúz, presidente de la red departamental de defensores de derechos humanos, aseguró que el componente militar en el marco de la Conmoción Interior podría intensificar el conflicto en la región.
"Hemos planteado que el estado de conmoción echa leña al fuego, al entrar un nuevo actor al conflicto, como son las fuerzas militares, pero más reforzadas y con una serie de atribuciones por parte del gobierno", expresó Pertúz.
Además, Pertúz agregó que la militarización no resolverá la alteración del orden público en la zona si no hay inversión y desarrollo de políticas públicas integrales.