Resumen
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)Cuando yo era un pelado de bachillerato me gustaba leer a la lata de cuantas carajadas cayeran a mis manos, pero claro que, con sumo agrado, a Emilio Salgari, a Jack London, a Julio Verne, y las columnas de Alfonso Castillo Gómez de El Espectador, entre otros. Y biografías de grandes personajes. Pero en la primaria empecé cascándole recio a “Santo, el enmascarado de plata”, poco después a las novelas de vaqueros de Marcial La Fuente Stefanía, y a policíacas como El Agente 007 y a Nick Carter, entre otros.
Yo le aconsejo a todos los pelados de ambos sexos, para que Florence Thomas no se me emberraque, que lean biografías porque ahí es donde uno aprende, cómo se forjó el acero. Cómo se autofabrican los intelectuales tesos. Los científicos. Los verdaderos políticos que fabricarán el destino de la patria. Recuerdo que me causó profunda preocupación, por mi corta edad, cuando leí que Edgar Alan Poe, uno de los grandes escritores de todos los tiempos, había muerto de Delirium Tremens. Después supe que de esa enfermedad morían famosos intelectuales, científicos, hombres de negocios, gobernantes y deportistas.
Lo saco a relucir, es porque, los fines de semana, sobre todo con puente festivo incorporado, en Barbosa se bebe mucho trago. Incluso en la franja de menores de edad. Para tratar el asunto, hay que meter en el cuento al núcleo familiar, y a gobernantes y autoridades porque todos tienen su parte. En última instancia, al mismo Estado borrachín que admite, permite y fomenta.
Claro porque, tenemos que admitir que se trata de un proceso dialéctico con componentes culturales a través del cual, la sociedad se ha ido desmembrando y “gomorrizando”, en gran medida, mediante el abuso de las drogas sicoactivas y el licor. Dejo claro que no se trata de la irresponsabilidad del alcalde, del gobernador, o del comandante de policía. No. Es sencillamente la inercia de la dinámica social, y así es en casi todo el planeta. Pero también es cierto que estas instituciones no hacen lo suficiente para controlarlo.
Empecemos porque en los campos de Colombia, el guarapo, una legítima bebida alcohólica, hace parte del menú alimenticio de la comunidad campesina, y por eso, una buena parte de esa franja, es un foco de alcoholismo en el país, al que no se le ha puesto debida atención. En los sectores donde hay producción panelera, aunque se ha venido restringiendo tímidamente, el guarapo es parte de la alimentación del obrero campesino. Y en el peor de los casos, ya alcohólico el individuo, terminada su jornada laboral, redondea su ingesta de licor en las cantinas.
Además, por herencia cultural y por costumbres ancestrales heredadas de nuestros aborígenes, y reforzadas por la producción panelera, los santandereanos y los boyacenses de la Hoya del río Suárez, origen del 47% de la producción panelera nacional, tiene un antecedente de guarapismo desde temprana edad, que termina finalmente en alcoholismo de muchos individuos de esa franja de población.
En Barbosa, por su vocación socio-económica y práctica social, y cuya fuente de ingresos en gran parte fluyen por la industria de la diversión, en la que se incluye el consumo de licor, se necesita implementar campañas para, “Construir Cultura Ciudadana”, oído, Construir Cultura Ciudadana, capaz de sustituir costumbres nocivas y anacrónicas, ya que estas retrasan procesos sociales como la educación secundaria y universitaria.
De la misma manera afecta los procesos de enseñanza deportiva, cultural y científica, a la vez que se estandariza el consumo no sólo de alcohol, sino de peligrosas drogas sicoactivas. Como una consecuencia evidente, se nota de lejos que, en Barbosa, aparte de una minoría, los índices de lecturabilidad y los procesos de intelectualización e incremento del grado de calidad profesional, se van reduciendo ostensiblemente con el paso del tiempo.
Por sus altos índices de desarrollo, Barbosa ciudad-región, necesita de profesionales de más reputada calidad en todos los ramos. Los alcaldes y concejales de la localidad, de igual manera, deben y tienen que ser de acreditada preparación profesional, ética e intelectual. Barbosa no es un pueblito colonial.