Resumen
Los fabricantes de autos eléctricos, incluyendo Tesla, enfrentan dificultades financieras debido a los altos costos de producción, lo que impide la creación de versiones asequibles. Esto amenaza la expansión del mercado de vehículos eléctricos en EE.UU.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
La fabricación de autos eléctricos económicos está poniendo a prueba la estrategia de expansión de los principales fabricantes de automóviles en EE.UU., con empresas como Ford y Rivian enfrentando importantes retos financieros. La reciente eliminación de las versiones más asequibles de la Cybertruck de Tesla de su página de pedidos en línea es un indicio preocupante que afecta no solo a Tesla, sino a toda la industria.
Actualmente, solo están disponibles dos versiones de “edición limitada” de la Cybertruck, cada una con un precio inicial cercano a los 100 mil dólares. Esto contradice la estrategia tradicional de escalar producción para reducir costos, sugiriendo que fabricar una versión más económica no resulta viable por ahora.
Este fenómeno refleja una tendencia alarmante en la industria de vehículos eléctricos en EE.UU. Tesla ha enfrentado dificultades para equilibrar costos y demanda en sus vehículos eléctricos durante casi dos años. A pesar de haber expandido agresivamente su capacidad de producción y reducido los precios para estimular la demanda, ha logrado pocas mejoras en ventas y márgenes.
Mientras Tesla sigue siendo rentable gracias a su ventaja inicial y escala, sus competidores más pequeños están en una situación diferente. Ford Motor Co., Lucid Group Inc., y Rivian Automotive Inc. muestran cifras que evidencian la lucha del sector para alcanzar rentabilidad en el mercado eléctrico. En conjunto, estas tres empresas vendieron 361,332 vehículos eléctricos desde principios de 2022 hasta junio de este año, una cifra inferior a la que Tesla vende en un trimestre. Esta falta de escala se traduce en pérdidas operativas combinadas de unos 32 mil millones de dólares, o 88 mil dólares por vehículo.
Tesla ha pospuesto el lanzamiento del anticipado Model 2, que se esperaba reduciría a la mitad los costos de producción, en favor de modelos menos ambiciosos. Mientras tanto, otros fabricantes están desarrollando versiones más económicas que se lanzarán en los próximos años.
Elon Musk ha descrito a Tesla como estando “entre dos grandes olas de crecimiento”, pero el verdadero riesgo es que la empresa, junto con sus competidores y la revolución de los vehículos eléctricos en EE.UU., caigan en una prolongada etapa de estancamiento.
