Resumen
Un funcionario del gobierno de Gustavo Petro, Olmedo López, enfrenta una investigación por presuntos sobrecostos en la compra de carrotanques para mitigar la sequía en Alta Guajira. Se sospecha que se creó una 'empresa de papel' para beneficiarse del negocio.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
El que parecía ser uno de los inamovibles funcionarios del gobierno de Gustavo Petro Urrego cayó estrepitosamente esta semana por la compra de varias decenas de carrotanques adquiridos por la Dirección Nacional de Control del Riesgo, organismo dependiente de la Presidencia de la República, para atender las tragedias de la naturaleza, las consecuencias de la sequía y enfrentar los incendios forestales que ha dejado el intenso verano.
Hace varios años, a su paso por una alcaldía del departamento de Antioquia, el señor Olmedo López, prevalido del poder político y haciendo alarde de sus facultades omnímodas, había realizado en su departamento contratos ficticios para obras invisibles, que fueron investigadas por el valiente ex Procurador General de la Nación, Alejandro Ordóñez Maldonado.
Cuando se destapó el escándalo por la compra de los cuarenta y dos carrotanques para transportar agua de cualquier lugar del país hacia la zona desértica de la Alta Guajira, Olmedo López recibió órdenes del presidente de la República, Gustavo Petro para que fueran enviados rápidamente, con el fin de mitigar la situación de centenares de familias raizales, que han sufrido por la falta de agua.
Bajo la figura constitucional de ‘La Urgencia Manifiesta’, improvisaron la creación de una ‘empresa de papel’ al estilo sastre, para apoderarse del suculento negocio. Llegaron los cuarenta y dos carrotanques suministrados por el anónimo proveedor, un joven muchacho, vendedor de baratijas, que aparece como representante legal de una empresa de papel, que ha sido habilitada para la ocasión, con el fin de ganarse ilegalmente una coima de trece mil millones de pesos, tal como lo denuncia el senador santandereano Jota Pe Hernández.
Olmedo López sacaba pecho diciendo que era el amigo incondicional del presidente Gustavo Petro y que contaba con su respaldo para realizar estas millonarias compras, que ahora lo tienen en la picota pública, esperando el resultado de las investigaciones penales por presuntos sobrecostos en la adquisición de una flota de carrotanques, para cargar agua de cualquier lugar de Colombia hacia las zonas desérticas del país.
El escándalo que produjo el negocio de los carrotanques para atender la emergencia del verano en La Guajira y al parecer en unos municipios del Magdalena Medio Santandereano, se llevó de bruces a Olmedo López, que tendrá que afrontar varios procesos penales por presunto sobrecosto en las compras que ha venido realizando la Dirección Nacional para el Control del Riesgo. Como decían nuestras abuelas: ‘A cada marrano le llega su día’.
