Resumen
Luisa González y Daniel Noboa irán a una segunda vuelta electoral en Ecuador tras obtener un empate técnico. La contienda se centra en la preocupación por la economía, seguridad y migración. Noboa busca la reelección y González promete velar por los derechos de los migrantes.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)Las elecciones presidenciales en Ecuador dejaron un escenario de empate técnico entre el actual mandatario, Daniel Noboa, y la candidata Luisa González, quienes disputarán la segunda vuelta tras una jornada marcada por la preocupación por la economía y la seguridad.
Con más del 90 % de los votos escrutados, Noboa obtuvo el 44,3 %, mientras que González alcanzó el 43,8 %, según los resultados oficiales. A pesar de que algunas encuestas previas anticipaban una posible victoria de Noboa en primera vuelta, el estrecho margen entre ambos candidatos obliga a un balotaje.
Desde Quito, González celebró lo que calificó como una “gran victoria” al haber forzado la segunda vuelta. “Hemos ganado”, afirmó ante sus seguidores. Por su parte, los simpatizantes de Noboa festejaron en Quito y Guayaquil, con la expectativa de que el presidente logre la reelección.
El proceso electoral transcurrió bajo un fuerte operativo de seguridad. Noboa desplegó militares en los colegios electorales y ordenó el cierre de las fronteras terrestres con Colombia y Perú, en un intento de evitar incidentes como el asesinato de un candidato en los comicios de 2023.
Durante su mandato de 15 meses, Noboa ha implementado medidas extremas contra la violencia, incluyendo el estado de emergencia y el uso de poderes ejecutivos extraordinarios para combatir a los cárteles de droga. Sin embargo, el país sigue enfrentando altos índices de asesinatos, secuestros y extorsión.
La economía también ha sido un eje central en la contienda. Noboa recurrió al Fondo Monetario Internacional para obtener un fondo de emergencia de 4.000 millones de dólares, mientras que González ha expresado que aceptaría la ayuda del FMI, siempre que no afecte a las familias trabajadoras.
Otro desafío para el próximo gobierno será el retorno de miles de migrantes ecuatorianos que podrían ser deportados desde Estados Unidos. González ha prometido exigir respeto por sus derechos y criticó a la administración de Noboa por no defender a sus ciudadanos.