Resumen
Venezuela suspendió las actividades de la Oficina del Alto Comisionado de los Derechos Humanos de la ONU y ordenó la salida de su personal, luego de que la Oficina expresara preocupación por la detención de la activista Rocío San Miguel.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
El régimen de Venezuela suspendió las actividades de la Oficina del Alto Comisionado de los Derechos Humanos de la ONU en Caracas, instalada en 2019, y ordenó la salida de su personal en 72 horas. Esta decisión se dio después de que la Oficina expresara preocupación por la detención de la activista Rocío San Miguel.
El canciller del régimen venezolano, Yvan Gil, manifestó que la suspensión se debe al papel "impropio" que consideran que la Oficina ha tenido, convirtiéndose en un "bufete particular del grupo de golpistas y terroristas" que actúan contra el país.
El régimen mantendrá la suspensión "hasta tanto rectifiquen públicamente ante la comunidad internacional su actitud colonialista, abusiva y violadora de la Carta de las Naciones Unidas". Además, realizarán una revisión integral de los términos de cooperación técnica en los próximos 30 días.
La Oficina Técnica de Asesoría del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos se instaló en Venezuela en 2019 y su labor principal es brindar apoyo para la implementación efectiva de las recomendaciones emitidas en los informes sobre la situación en Venezuela.
La Misión de la ONU expresó su preocupación por la detención de Rocío San Miguel y pidió al régimen de Nicolás Maduro poner fin a la represión contra los opositores. Subrayaron que estas detenciones forman parte de un plan para silenciar a los críticos y a quienes se perciben como opositores.
