“Maquilando felicidad”, un proyecto que transforma vidas en Piedecuesta
Resumen
"Maquilando Felicidad" en Piedecuesta busca mejorar la vida de poblaciones vulnerables mediante capacitación, salud preventiva y desarrollo productivo, destacando la participación activa de UDES. Niños y familias son capacitados en salud y convivencia familiar.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
En el barrio Barro Blanco de Piedecuesta, la esperanza se cose y se teje con hilo de compromiso social. A través del proyecto “Maquilando Felicidad”, la Universidad de Santander (UDES), en alianza con la Comunidad de Hermanas de la Caridad Dominicas de la Presentación de la Santísima Virgen, viene trabajando para mejorar la calidad de vida de poblaciones vulnerables, especialmente mujeres, jóvenes y adultos de este sector.
La iniciativa nace del Convenio Marco de cooperación entre ambas instituciones, y tiene como objetivo apoyar y fortalecer los programas de la Fundación Marie Poussepin mediante acciones integrales que abarcan desde la capacitación y la asistencia técnica, hasta la salud preventiva y el desarrollo de ideas productivas.
“Las necesidades que identificaron en la comunidad nos orientaron hacia ejes de acción muy claros: el fortalecimiento de unidades productivas para generar ingresos, la identificación de vocaciones en los jóvenes y su capacitación para el emprendimiento, la asociatividad y la empleabilidad”, explicó Martha Carreño, coordinadora del proyecto.
Además, se han promovido programas de salud física y mental, educación ambiental, formación de líderes comunitarios y campañas para la detección temprana de enfermedades auditivas en niños desde los tres años.
Uno de los pilares del proyecto ha sido la participación activa de profesores y estudiantes UDES de diversas disciplinas, en procesos educativos y acompañamientos en territorio. Carolina Figueroa Cuello, enfermera y docente del programa de Enfermería de la universidad, ha liderado algunas de las sesiones pedagógicas con niños, adolescentes y padres de familia en la Institución Educativa ‘Luis Enrique Figueroa Rey’.
“Hemos desarrollado talleres participativos para padres y actividades lúdicas con niños y adolescentes dentro de las aulas, lo que ha facilitado abordar temas complejos como la salud sexual y reproductiva desde la confianza, la participación activa y el conocimiento previo que tienen los jóvenes”, expresó Figueroa.
Las sesiones con adolescentes incluyen dinámicas orientadas al autocuidado, la toma de decisiones responsables y el conocimiento sobre métodos de planificación y enfermedades de transmisión sexual. Con los padres, se ha trabajado el fortalecimiento de la convivencia familiar mediante ejemplos reales de crianza respetuosa.
“A través de situaciones reales, se ha abordado la crianza respetuosa para que los padres puedan identificar vivencias similares en sus hogares”, señaló la docente, quien también hizo un llamado a otras instituciones: “Es fundamental realizar un diagnóstico interdisciplinar con las directivas, para construir planes de trabajo que respondan a las realidades de cada comunidad. Y al momento de educar, ser muy creativos y cuidadosos para que los mensajes realmente lleguen a quienes más lo necesitan”.