Menores recibieron entrenamiento militar en Rusia
Resumen
83 niños realizaron un exigente entrenamiento militar en Rusia como parte de un programa que busca inculcar patriotismo y resiliencia, mientras que críticos lo ven como propaganda. Esto refleja la creciente militarización de la infancia en el contexto de la guerra en Ucrania.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)Niños de entre 8 y 17 años participaron en un entrenamiento militar en las orillas del río Don, en la región de Rostov, Rusia, bajo la dirección de un escuadrón cosaco y la supervisión de soldados veteranos de la guerra en Ucrania. En total fueron 83 menores quienes, vestidos con uniformes de camuflaje, realizaron una exigente “marcha de ruta” que incluyó correr, arrastrarse por la arena y atravesar aguas poco profundas. Algunos portaban armas reales, mientras que otros sostenían réplicas de juguete.
El ejercicio, que buscó recrear condiciones de combate, fue parte de un programa de formación que en los últimos años ha ganado espacio en Rusia, donde incluso a los niños más pequeños se les instruye en el uso de armamento, drones y tácticas básicas de guerra. Según las autoridades, este tipo de actividades tiene como propósito “inculcar patriotismo” y “desarrollar resiliencia nacional”, mientras que organizaciones independientes como “Ne Norma” denuncian que se trata de una forma de adoctrinamiento y propaganda.
Entre los participantes destacó Ivan Glushchenko, de 8 años, quien aseguró que lo que más le gustó fue “lanzar granadas y disparar balas de juguete”. Otros adolescentes señalaron que la experiencia les permitió poner a prueba sus límites físicos y fortalecer su voluntad. Anton, uno de los mayores, afirmó que su motivación es unir su futuro al servicio militar: “Quiero servir a mi país y ser leal a mi causa hasta el final”.
Los instructores, varios de ellos veteranos heridos en combate, afirmaron que este tipo de jornadas permiten transmitir experiencia y valores de camaradería. Alexander Shopin, soldado ruso convaleciente de sus heridas en Ucrania, entrenó junto a su hija y aseguró que “se puede ver cómo se forja una familia a partir de ellos”. No obstante, el agotamiento fue evidente entre los niños; algunos terminaron exhaustos y entre risas nerviosas admitieron que la intensidad fue abrumadora.
El evento refleja la creciente militarización de la infancia en Rusia en el marco de la guerra en Ucrania, con una frontera difusa entre formación patriótica y entrenamiento bélico, lo que ha generado preocupación en sectores internacionales defensores de los derechos de los niños.