Mi labor entre el dolor y la Fe

Así he vivido los dos últimos años de mi vida, entre el dolor y la Fe, sobre todo el año 2024, año donde fui hospitalizado por una dolencia en mi nuca que me afectó todo mi cuerpo, lo peor es que fueron 5 días allá en la Clínica que no me sirvieron de nada, o mejor, si me sirvieron, me sirvieron para perder 24 kilos de peso, porque el problema de la nuca me originó problemas en mi boca y en mi garganta que no me dejaba comer nada, estando en la Clínica solo tomaba sopas, líquido de sopas, eso fue muy duro y como digo, salí peor, con el mismo dolor y en un estado de desnutrición alto, lo único rescatable de todo eso fue que me autorizaron unas terapias, que todavía me hacen y que en verdad, me sirvieron mucho y me ayudan a mitigar el dolor, dolor que según los médicos, nunca se irá de mi cuerpo, aunque Dios como siempre, tiene la primera, la última y la única palabra, así lo creo porque creo en Él.

Llegando al Apartamento conté con la ayuda de mi hermano quien me compró unos suplementos alimenticios que me permitieron empezar a subir algo de peso, luego con las terapias mencionadas empecé a comer algo sólido, eso me fue ayudando a recuperar mis fuerzas, mientras tanto, sin poder hablar bien, porque la voz se me afectó y todavía la tengo afectada, seguí tratando de hacer mi trabajo, en estos dos años no he dejado de escribir mis Columnas, recuerdo que en esa semana que estuve en la Clínica, redacté mi Columna en el celular y la pude enviar.

Así han transcurrido los dos últimos años de mi vida, sigo afectado por el dolor pero, con todo lo negativo que es estar enfermo, sigo con mucha FE, sigo orando a diario y en todo momento, como Cristiano que soy creo totalmente en Dios, creo que Él me sanará totalmente y poder, hasta cuando Él lo decida, seguir haciendo mi labor, escribiendo, llegando con mis Columnas y con mis documentos a muchas partes, pidiendo con exigencia respetuosa a las Entidades y a las personas, el respeto de los mínimos Derechos que todavía tienen las PPL, Personas Privadas de la Libertad.

Esa es mi labor y sigo comprometido en ella, haciéndola con mucho esfuerzo, con mucho respeto y con el deseo sincero de poder lograr lo que me he propuesto últimamente y que a Fe creo que algo se ha logrado, una #prisiondignayhumana.

Dios conoce mis luchas diarias, créanme que no es nada fácil sentir este dolor en la nuca, el llamado mico, ese dolor me impide caminar normalmente, me impide todavía hablar bien, por eso, he estado un poco alejado de los Medios porque es para mí difícil, además, porque no puedo permanecer de pie por mucho tiempo, el peso que siento en la nuca me hace perder el equilibrio.

Difícil, si, bastante, pero poder levantarme cada día, es una Bendición, Dios me lo permite todavía y como digo, solo EL hace y seguirá haciendo que siga en mi lucha, EL permita que cada día, ojalá con menos dolor, pero con más FE, poder ser para much@s, Testimonio de Vida, Amén.

Voy con toda. Amén.