“Necesitamos llegar al poder de Uno”: David Luna insta a la derecha a unirse
El precandidato presidencial David Luna lanzó ayer un llamado urgente a la unidad de todas las fuerzas políticas que se oponen al gobierno del presidente Gustavo Petro, advirtiendo que la dispersión de candidaturas en el espectro de centro-derecha y derecha podría pavimentar el camino para la victoria de la izquierda en las elecciones presidenciales de 2026.
Por Camilo Ernesto Silvera Rueda - Redacción Política / EL FRENTE
El mensaje se produce en un contexto político marcado por el asesinato de Miguel Uribe, hecho que Luna calificó como “el más grave de los últimos treinta años” y que, en su opinión, obliga a los sectores democráticos a superar diferencias y construir un consenso real.
Actualmente, la derecha y el centro-derecha suman cerca de 70 precandidaturas presidenciales, un escenario que, según el propio Luna, conduce inevitablemente a la atomización del voto y favorece a la izquierda, que ya trabaja en torno a la figura de un solo candidato que, con alta probabilidad, será escogido por el propio presidente Petro.
Una Gran Mesa Nacional
En su propuesta, Luna plantea la creación de una Gran Mesa Nacional que reúna a todos los líderes y movimientos que comparten principios democráticos, rechazan el radicalismo y defienden la vida. El objetivo: acordar reglas claras para someterse a un mecanismo —ya sea encuesta o consulta— que defina un único candidato capaz de enfrentar a la izquierda unida.
“Me despojo de toda vanidad para representar esa unión o para cargar la maleta de otro hombre o mujer que defienda la democracia”, afirmó, subrayando que, en un momento tan crítico para el país, su ambición personal es secundaria frente a la necesidad de salvar el proyecto democrático.
Luna insistió en que la unión no debe incluir a quienes defienden el proyecto político de Petro ni a actores que no hayan sido coherentes en sus posiciones. A su juicio, el bloque opositor debe construirse sobre la base de convicciones firmes y una visión común para enfrentar lo que considera una connivencia del actual gobierno con estructuras ilegales como el ELN, las disidencias de las FARC y el Clan del Golfo, organizaciones que se financian del narcotráfico.
“El narcotráfico es hoy la gasolina que alimenta la división del país y el fortalecimiento de las organizaciones criminales. No podemos permitir que ese combustible siga erosionando nuestra democracia”, advirtió.
Un llamado marcado por el dolor y la indignación
El asesinato de Miguel Uribe, dijo Luna, marca un antes y un después en la contienda presidencial y en la política colombiana. Considera que la mejor manera de honrar su memoria es concretar una unión verdadera, sin cálculos mezquinos, que permita a Colombia “reencontrar la paz” y dejar atrás el clima de miedo y odio que ha ensombrecido la vida pública.
“No puede haber paz sin verdad, ni reconciliación sin justicia. Este debe ser también un propósito inaplazable de esta unión: que crímenes como este no queden impunes y que la vida de ningún colombiano vuelva a ser arrebatada por la violencia política”, concluyó.
Los analistas advierten que, si la oposición no logra una fórmula única, la presencia de decenas de candidatos en el tarjetón presidencial fragmentará el electorado no alineado con el petrismo. Con la izquierda cohesionada y movilizada bajo un solo liderazgo, la matemática electoral jugaría en su favor.
El llamado de David Luna busca precisamente revertir esa tendencia: que la derecha y el centro-derecha pasen de ser un archipiélago de aspiraciones individuales a un bloque compacto, capaz de competir en igualdad de condiciones contra una izquierda que ya tiene su estrategia de unidad en marcha.
