No es tabú, es salud: hablemos de higiene íntima masculina
Resumen
Profamilia destaca la importancia de la higiene íntima masculina para la salud sexual. Recomienda usar agua y jabón suave, evitar perfumes y mantener cuidado del prepucio. Cambios en la zona deben ser consultados con un médico para prevenir infecciones.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
En el marco del Día Mundial del Pene, Profamilia hizo un llamado abierto a todos los hombres del país a hablar sin tabúes sobre la importancia de la higiene íntima masculina, no solo como un hábito estético, sino como una práctica esencial para el autocuidado, la autoestima y la salud sexual.
La doctora Diana Torres, uróloga de Profamilia, explicó que la zona genital masculina requiere cuidados específicos debido a su constante exposición al sudor, fluidos corporales y actividad sexual. “Mantener limpio el pene no es solo una cuestión de presentación. Es una necesidad para prevenir infecciones, malos olores y complicaciones que pueden afectar la calidad de vida y las relaciones sexuales”, señaló.
El proceso de higiene, según Torres, debe comenzar con agua y jabón suave, preferiblemente con pH neutro. “Es importante evitar jabones antibacteriales o productos diseñados para la higiene íntima femenina, ya que pueden alterar el equilibrio natural de la piel”, indicó. Luego del lavado, es clave enjuagar bien y secar completamente la zona para evitar la aparición de hongos.
Un error frecuente que se debe evitar, advierte la experta, es la aplicación de perfumes o fragancias en el área genital. “El pene no necesita oler a colonia. Estos productos pueden irritar e incluso causar reacciones alérgicas”, añadió.
Cuidado de testículos y prepucio
El lavado de los testículos debe seguir el mismo proceso: agua, jabón suave y buen secado. En el caso de los hombres no circuncidados, es esencial retraer el prepucio y lavar adecuadamente el glande para prevenir acumulación de esmegma, humedad y bacterias. “Para quienes están circuncidados, también se requiere higiene cuidadosa, aunque se debe evitar el exceso de fricción para no causar irritaciones”, explicó la doctora Torres.
Profamilia también hizo énfasis en la importancia de estar atentos a cualquier cambio en la zona íntima. Olores fuertes, secreciones, verrugas o protuberancias son señales que no deben pasarse por alto, ya que podrían indicar la presencia de infecciones como herpes genital, gonorrea, sífilis, clamidia o VPH.
“Un mal olor persistente después del lavado puede ser señal de una infección por hongos o de una higiene deficiente. En cualquiera de los casos, se debe acudir a un profesional de la salud”, subrayó Torres.
Mitos y realidades del vello genital
En cuanto al vello, la uróloga fue clara: no es sinónimo de suciedad. “El problema no es el vello en sí, sino la falta de higiene. Si se opta por recortarlo, es mejor hacerlo con tijera o máquina. Las cuchillas o cremas depilatorias pueden irritar la piel o incluso generar quemaduras”.
Profamilia reiteró la importancia de revisar con regularidad la salud del pene y acudir a chequeos médicos ante cualquier duda o molestia. “Un pene limpio y sano no solo previene infecciones. También mejora la autoestima, las relaciones de pareja y la percepción del propio cuerpo”, concluyó la especialista.
Finalmente, la entidad recordó que el uso del condón es fundamental para prevenir infecciones de transmisión sexual y embarazos no planeados. Además, invitó a los hombres a acercarse a cualquiera de sus más de 50 clínicas en el país, o a comunicarse por sus canales habilitados: línea telefónica 300 912 4560 o WhatsApp 318 531 0121, donde profesionales capacitados atienden con confidencialidad y respeto por la salud sexual y reproductiva de todos.