Optimización de atención y ruta única para salvar vidas

Optimización de atención y ruta única para salvar vidas

Resumen

Bucaramanga implementa una red médica para reducir el impacto de los ataques cerebrovasculares. La iniciativa optimiza tiempos de respuesta y procedimientos, mejorando significativamente la atención y salvando vidas en la región.

Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
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by Danilo Pérez

Red de Atención Especial para Casos de Ataque Cerebrovascular en Bucaramanga

Desde la Secretaría de Salud se subraya que la red creada en Bucaramanga busca acortar tiempos y estandarizar procedimientos para disminuir la mortalidad de pacientes evitable en la región.

La Secretaría de Salud de Bucaramanga lanzó la Red de Atención Especial para Casos de Ataque Cerebrovascular; la iniciativa, presentada por la doctora Claudia Mercedes Amaya, concentra hospitales, clínicas, servicio de emergencias y organismos de socorro en una ruta única para reducir daños neurológicos y salvar vidas.

En entrevista con el Noticiero Regional de Santander de Radio  Bucarica y Diario EL FRENTE, la Secretaria explicó el propósito de la red: “Se crea esta red de atención especial para el ataque cerebrovascular. Volvemos a Bucaramanga, una ciudad cardioneuroprotegida. El accidente cerebrovascular, a veces llamado trombosis o hemiplejia, depende del tiempo, porque si se diagnostica y traslada al paciente con rapidez, el daño neurológico disminuye. Existe una ventana de 4 horas con 30 minutos para intervenir con mayor eficacia”. Amaya señaló que la resolución 161 del 19 de noviembre de 2025 formaliza la articulación entre actores locales.

Instituciones enlazadas

Sobre cómo reconocer un ataque cerebrovascular, la Secretaria resumió el mensaje en un acrónimo sencillo: “CORRE” C, cara caída; O, alteración visual; R, debilidad rápida en un brazo o pierna; R, dificultad para hablar; E, equilibrio comprometido. Al detectar cualquiera de estos signos, hay que notificar al SEM para solicitar una ambulancia y activar la ruta de atención”.

Amaya recordó que cada minuto sin tratamiento implica la pérdida de millones de neuronas; por tanto, la rapidez condiciona la recuperación y las secuelas. La red reúne al Hospital Internacional de Colombia, La Foscal, la Clínica Comuneros, el Hospital Universitario de Santander y la Clínica Bucaramanga.

“Estas instituciones cuentan con especialistas y equipos adecuados. A ellas se suman las EPS, el centro regulador de urgencias, el servicio de Emergencias Médicas, la Academia y los organismos de socorro”, detalló la Secretaria. El personal de ambulancias y los paramédicos completaron formación específica; además, más de 1.500 ciudadanos recibieron capacitación comunitaria en maniobras de soporte vital.

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Distinción por manejo de ataques cerebrovasculares

La funcionaria destacó la distinción Angels en Categoría Diamante, otorgada por una organización internacional especializada en manejo de ataques cerebrales.

“El servicio de Emergencias Médicas repite este reconocimiento. La evaluación pondera tiempos de respuesta, protocolos y sistemas de información. Somos la única ciudad en Colombia con enlace directo entre el sistema de emergencias y la Policía Nacional, lo que facilita traslados más ágiles”, dijo Amaya.

Ese sello internacional confirma que los protocolos y los registros de información cumplen estándares exigentes. La secretaria abordó factores de riesgo que elevan la probabilidad de sufrir un ACV, como  hipertensión, dislipidemia, colesterol y triglicéridos altos, sobrepeso, obesidad, sedentarismo y antecedentes cardiovasculares.

“Es más frecuente en personas mayores y en quienes ya padecen condiciones como hipertensión o diabetes. Sin embargo, la prevención y el control médico reducen el riesgo”, indicó, y advirtió sobre las consecuencias funcionales cuando el tratamiento se demora.

Respecto a la operatividad, Amaya explicó que “la atención empieza con la llamada al Sistema  de  Emergencia Médica, SEM, en Bucaramanga, desde allí se activa la ambulancia y el código ACV. El objetivo es que, al llegar el paciente a la institución preparada, todo el personal conozca el protocolo y la atención sea inmediata. La prioridad clínica se califica como triaje 1, de máxima urgencia”.

Rechazo para el uso indiscriminado de pólvora

Así mismo, durante la entrevista la Secretaria condenó el uso de pólvora en temporada navideña. “Las quemaduras, la contaminación del aire y los trastornos respiratorios agravan la salud pública; afectan además a animales domésticos. Invitamos a celebrar sin pólvora”, señaló, y pidió alternativas de celebración que no pongan en riesgo a las familias.

Amaya finalizó con un llamado claro a la comunidad: “Este es un logro colectivo. Bucaramanga dispone ahora de una red capaz de responder con rapidez y calidad. Conocer los síntomas, exigir intervención inmediata y acceder al sistema de emergencias marcará la diferencia entre la discapacidad y la recuperación”.

La resolución que formaliza la red quedó vigente el pasado 19 de noviembre de 2025; desde esa fecha la ciudad cuenta con una ruta consolidada para enfrentar los ataques cerebrovasculares.

La Secretaria informó que más de 1.500 ciudadanos recibieron capacitación en reanimación cardio-cerebro-pulmonar. El servicio de Emergencias Médicas logró tiempos de respuesta de siete minutos desde la notificación hasta el traslado.

Antes existía una competencia entre ambulancias que retrasaba la llegada. Hoy la coordinación entre instituciones mejora la cobertura en el área metropolitana. Este avance representa un balance positivo para la gestión de la Secretaría en últimos dos años.

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por Danilo Pérez
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