Petro logró acabar con el paro minero en Boyacá tras acuerdo de transición energética

En la noche del 7 de agosto de 2025, el presidente Gustavo Petro confirmó a través de su cuenta en X que el paro minero en Boyacá fue levantado, tras alcanzar un acuerdo con los manifestantes. El pacto contempla la implementación de un plan de transición energética para la pequeña minería de carbón en el departamento, con el fin de adaptarla a nuevas tecnologías y diversificar las fuentes de sustento de las comunidades.

El anuncio se dio después de semanas de bloqueos que afectaron la movilidad, el suministro de combustible y la economía en municipios como Tunja, Paipa, Sogamoso y Duitama. Según cifras del sector transportador, el 98 % de la operación estuvo suspendida, con más de 800 salidas canceladas, alrededor de 45.000 usuarios perjudicados y pérdidas que superaron los $1.000 millones. La ausencia de corredores humanitarios agravó la situación de quienes necesitaban atención médica o cumplir con obligaciones laborales y académicas.

La fecha coincidió con la conmemoración de la Batalla de Boyacá, que este año se trasladó de su sede tradicional en el Puente de Boyacá a la ciudad de Leticia, Amazonas. Aunque el Gobierno argumentó que el cambio respondía a un mensaje de soberanía en el marco de la disputa limítrofe con Perú por la isla Santa Rosa, el propio presidente reconoció que la conflictividad social en Boyacá y Cundinamarca influyó en la decisión.

Durante su discurso en Leticia, Petro señaló que las problemáticas de los campesinos en páramos y selvas tienen causas comunes, vinculadas a la falta de una reforma agraria. Además, propuso instalar una mesa de diálogo con el sector esmeraldero del occidente de Boyacá para buscar un pacto que democratice las explotaciones y evite conflictos.

El levantamiento del paro genera expectativas entre los sectores productivos y sociales de la región, que ahora esperan la reactivación del transporte y la normalización de la actividad comercial. La instalación de mesas de trabajo para abordar asuntos mineros, agrícolas y territoriales será el siguiente paso, con el compromiso del Gobierno de dar soluciones de fondo a las demandas que motivaron la protesta.