Resumen
Un niño de 13 años en Caquetá murió por fiebre amarilla. La secretaria de salud departamental, Mayerli González Arias, instó a la comunidad a vacunarse y evitar la automedicación, destacando la importancia de la vacunación gratuita disponible para personas entre 1 y 60 años.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
Un menor de 13 años se ha convertido en la primera víctima mortal de fiebre amarilla en Caquetá, según informó Caracol Radio. El niño fue atendido inicialmente en una droguería, donde recibió la conocida "tripleta" de medicamentos, pero su estado no mejoró. Posteriormente, fue trasladado al hospital María Inmaculada en Florencia y luego a un centro médico en Neiva, donde lamentablemente falleció debido a complicaciones.
Mayerli González Arias, secretaria de salud departamental, hizo un llamado urgente a la comunidad sobre la importancia de vacunarse y evitar la automedicación. Resaltó que la vacuna contra la fiebre amarilla es gratuita y está disponible para personas entre 1 y 60 años, advirtiendo que esta tragedia podría haberse evitado con un esquema de vacunación adecuado.
La fiebre amarilla presenta síntomas que pueden confundirse con otras enfermedades, como el dengue, tales como fiebre, dolor abdominal, vómito y dolores musculares. González Arias instó a la población a buscar atención médica inmediata al presentar estos síntomas, en lugar de recurrir a la automedicación, que puede agravar la situación.
La muerte del menor ha generado alarma en la región, y las autoridades sanitarias están intensificando las campañas de vacunación, especialmente en áreas rurales. La vacunación es la principal medida de prevención contra esta enfermedad viral, que, aunque no siempre es fatal, puede provocar complicaciones graves si no se trata a tiempo.
