Resumen
El puente de $1.500 millones en Cepitá, Santander, presenta fallas técnicas solo dos meses después de su construcción. Los habitantes temen por su seguridad al cruzarlo. Una comisión realizará estudios para resolver el problema en unos 20 días.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)El puente que conecta la vereda San Miguel en Cepitá, Santander, con los municipios de Aratoca y Curití, ha generado preocupación en la comunidad debido a fallas técnicas en su estructura, a pesar de haber sido entregado hace tan solo dos meses por el exgobernador Mauricio Aguilar Hurtado.
Con un costo de $1.500 millones y la promesa de facilitar el comercio de cítricos y otras frutas, el puente ha resultado inutilizable y peligroso para los habitantes que temen por su seguridad al cruzarlo.
El alcalde de Cepitá, Pedro Pablo Carreño, desmintió rumores de que el puente se había caído, pero confirmó que ha presentado dos fallas en sus dos meses de funcionamiento. La primera ocurrió el 26 de enero y la segunda, el 13 de febrero, debido a problemas de soldadura y a una malla que se ha fracturado por la inestabilidad del terreno.
La Gestión de Riesgo del Departamento está al tanto de la situación y una comisión realizará estudios para determinar las correcciones necesarias. La empresa contratista también ha sido requerida para ejecutar las pólizas correspondientes.
El alcalde señaló que la inversión fue de casi dos mil millones de pesos y que la construcción se llevó a cabo según las peticiones de las comunidades para facilitar el comercio local. Se espera que la situación se resuelva en aproximadamente 20 días, según informaron voceros de Gestión de Riesgo.