Resumen
Las plataformas digitales cambiaron el panorama informativo en Santander, generando preocupación entre emisoras tradicionales. El uso de nuevas tecnologías no reguladas ha causado malversación de fondos. Hay un llamado para valorar la radio local como pilar cultural y comunicativo.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
Muchos se espantaron cuando vieron llegar las plataformas digitales, que cambiaron súbitamente el escenario recreativo e informativo de los ochenta y siete (87) municipios santandereanos. Las cadenas radiales representadas por Radiosucesos RCN, Caracol Radio y el Circuito Todelar de Colombia también se espantaron y hasta pronosticaron la desaparición de las emisoras, que desde los diferentes municipios del departamento promueven con orgullo la cultura y el folclor de los santandereanos.
Algunos gobernadores y alcaldes, -- que desconocen la legislación en materia de comunicaciones radiales --, corrieron a contratar las ‘nuevas tecnologías de la información’ que no están reglamentadas por el Ministerio de las Tecnologías y en algunos casos son la causa del saqueo de recursos presupuestales, que en la mayoría de los casos se convierten en peculados que mantienen en aprietos a los funcionarios públicos. Se ha dado el caso de contratar campañas publicitarias de los gobiernos departamentales y municipales sin ningún control de los organismos oficiales, como ocurrió hace tres años con el ‘Plan de Medios de la gobernación de Santander’ que puso en aprietos a las directivas del Canal Regional de Televisión TRO.
El departamento de Santander posee sesenta y ocho (68) emisoras comerciales y muchas emisoras comunitarias, que no cuentan con ingresos suficientes para atender los costos de la nómina, mucho menos los costos de la energía eléctrica y las exacciones que han fijado caprichosamente las empresas privadas, como Sayco y Acinpro, encargadas de cobrar los ‘Derechos de Ejecución Musical’, caprichosamente impuestas por los negociantes que extorsionan a los empresarios de los medios radiales y televisivos.
Otro fenómeno que se viene presentando en Santander es la costumbre de pagarle cuantiosas sumas de dinero a ciertas publicaciones de carácter nacional, para hacerse a la imagen de algunos aspirantes a la presidencia de la república, al senado y la cámara de representantes, donde – como ha sido costumbre – son algunos ‘periodistas’ que hacen alarde de la existencia de emisoras digitales, que son una forma de robarse el dinero del estado y de comprometer penalmente a los funcionarios que, con el mayor descaro, manejan los medios de comunicación a punta de sobornos, desconociendo que las empresas radiales, los canales de televisión y los periódicos de mayor tiraje requieren de presupuestos altos para su financiación y sostenimiento.
La creación del Circuito Radial de la Cordialidad, en cabeza de un grupo de periodistas reconocidos por la opinión pública como heraldos de los municipios, de las provincias y del departamento, tiene puesta su mirada sobre el mapa de Santander, para recordarle a la opinión pública que esta región de Colombia ha sido la pionera en la industria de la radiodifusión y por eso, hay que pedirle al gobierno de Santander y a las alcaldías del departamento, para que revisen la importancia de contar en nuestro departamento con poderosas estaciones radiales como Radio Bucarica, con más de medio siglo entre las emisoras de Amplitud Modulada, que son las que llegan muy lejos en todos los ochenta y siete (87) municipios del departamento.
