Resumen
Colombia espera un incremento significativo en las precipitaciones en las próximas semanas, llevando alivio a la sequía y altas temperaturas. Las regiones del Caribe y Andina serán las primeras beneficiadas, pero la Orinoquia y la Amazonia podrían enfrentar escasez de lluvias.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
Con el país sumido en un complejo escenario de sequía y altas temperaturas, la noticia de la llegada anticipada de la temporada de lluvias es recibida con esperanza y preocupación por igual. Según Ghisliane Echeverry, directora del Ideam, se espera un aumento significativo en las precipitaciones en las próximas semanas, marcando el fin de la temporada del fenómeno de El Niño y el comienzo de un período de lluvias prolongado.
Las proyecciones apuntan a que las regiones del Caribe y la región Andina serán las primeras en experimentar este cambio climático, con un esperado incremento en las lluvias durante los meses de mayo, junio, julio y agosto. Estas precipitaciones, por encima de los promedios habituales, ofrecen un rayo de esperanza para mejorar los niveles de los embalses, que se han visto disminuidos peligrosamente.
Sin embargo, la situación es menos alarmante para las regiones de la Orinoquia y la Amazonia, donde se espera que las lluvias estén por debajo de lo normal durante el resto del año. Esta perspectiva plantea una alerta en estas zonas del país, que podrían enfrentar desafíos adicionales debido a la escasez de lluvias.
La ministra de Ambiente, Susana Muhamad, subrayó la importancia de monitorear cerca las condiciones climáticas y tomar medidas adecuadas en respuesta a los cambios observados. A pesar de las expectativas de que los embalses puedan aumentar hasta un 20% durante el mes de abril con la llegada de las lluvias, los expertos advierten que se necesita un análisis más detallado para evaluar la verdadera magnitud del impacto.
El fenómeno de El Niño, que ha contribuido significativamente a la sequía prolongada que enfrenta el país, está perdiendo fuerza, pero las lluvias esperadas para marzo estuvieron por debajo del promedio, lo que sugiere que el cambio climático sigue siendo un factor importante en esta situación.
