Roger Federer vuelve a la pista en un evento de exhibición en Shanghái: una cita cargada de nostalgia

Su Majestad vuelve al ruedo. Roger Federer, uno de los deportistas más icónicos de todos los tiempos, anunció su regreso a las canchas en el Roger & Friends Celebrity Doubles Match, una exhibición especial programada para el 10 de octubre en la pista central del Qizhong Forest Sports City Arena, durante la recta final del Masters 1000 de Shanghái.

Será un momento emotivo para los fanáticos: un año después de su última aparición en un partido de exhibición, el ex número uno del mundo y ganador de 20 títulos de Grand Slam volverá a competir en territorio asiático. Su participación será en la modalidad de dobles, una elección significativa, ya que su último encuentro en este formato también se dio en Shanghái en 2024.

La organización del evento ha confirmado que Federer compartirá pista con figuras de distintos ámbitos. Entre los invitados se encuentran los actores Donnie Yen y Wu Lei, además de la ex tenista china Jie Zheng, campeona de dobles en el Abierto de Australia y Wimbledon 2006. Esta combinación promete un espectáculo donde el tenis, la nostalgia y el entretenimiento se unirán.

Shanghái ocupa un lugar especial en la trayectoria del suizo. Allí protagonizó partidos memorables, y su regreso refuerza el vínculo con una afición que lo ha apoyado durante dos décadas. El Masters 1000 se desarrollará entre el 1 y el 12 de octubre, y la exhibición de dobles se integrará en los días finales del certamen, garantizando una amplia repercusión internacional.

Federer, quien inició su carrera profesional tras ser ball boy en el torneo de Basilea, acumuló récords legendarios: 237 semanas consecutivas como número uno, seis títulos en la ATP Finals, un oro olímpico en dobles y 103 trofeos en total, segundo en la historia del tenis. Su retiro en 2022, en la Laver Cup, marcó el final de una era, con una emotiva despedida junto a Rafael Nadal.

Ahora, a sus 44 años, Federer vuelve a empuñar la raqueta, no para conquistar un nuevo título, sino para revivir la magia que lo convirtió en un símbolo del deporte mundial. Para muchos, esta podría ser su última función sobre una pista, un verdadero The Last Dance del maestro suizo.